Una completa radiografía de la percepción de los ciudadanos respecto de la actividad política, entregó esta mañana el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) a través de la Encuesta Auditoría a la Democracia 2012
El sondeo se realizó con el apoyo metodológico del Consorcio de Centros de Pensamiento, que agrupa a los Centros de estudios CEP, Cieplan, Libertad y Desarrollo, ProyectAmerica, Instituto Libertad, Chile 21 y Fundación Jaime Guzmán. Esta es la tercera versión de la muestra, que se había aplicado por última vez en 2012.
Dentro de las principales conclusiones de esta investigación se desprende que si bien ha crecido la valoración del sistema democrático, esto no se ha traducido en la confianza en las instituciones y partidos políticos, que continúan registrando una baja.
Es así como un 64 por ciento de los encuestados apuntó a la democracia como el mejor mecanismo para gobernar por sobre otros regímenes. En esa línea, se registró una estrepitosa caída del respaldo al voto voluntario, que pasó desde un 77 por ciento en 2010 a un 57 por ciento en la última muestra. Por el contrario, el voto obligatorio aumentó su preferencia desde un 22 a un 41 por ciento. Esto luego de la implementación de la voluntariedad en el sufragio, que fue aplicada en elecciones Municipales del año pasado.
Precisamente, estos comicios fueron mal evaluados por el 38 por ciento de los consultados quienes aseguraron que el proceso fue “deshonesto”.
Otro de los resultados que se relacionan con este fenómeno indican que el 57 por ciento de las personas creen que la democracia funciona de forma regular en el país.
Respecto de los partidos políticos, un 54 por ciento piensa que sólo se representan a ellos mismos, mientras un 77 estima que deberían ser la voz de todos los chilenos. Además en una respuesta espontánea, un 18 por ciento aseguró que no representan a nadie y que sólo contribuyen a dividir el país.
Sobre la identificación con las principales coaliciones políticas del país, un 18 por ciento dijo asociarse a la Concertación y un 14 con la alianza. En tanto, un 58 por ciento señaló no identificarse con ninguno de los dos.
Finalmente, se detectó una pérdida de confianza general en las instituciones, excepto en los tribunales de justicia que se mantuvieron en un 23 por ciento.