Las pensiones del personal de nombramiento supremo de Carabineros (de subteniente hacia arriba) promedian 1 millón 642 mil 71 pesos mensuales. A su vez, el personal de nombramiento institucional (que agrupa a los suboficiales) recibe 563 mil 245 pesos mensuales. Y actualmente hay 25 mil 958 Carabineros jubilados, según informó el Jefe del Departamento de Pensiones de Dipreca, Óscar Ulloa.

En el caso de la Policía de Investigaciones (PDI), el promedio de las pensiones del personal de nombramiento supremo (de mayor rango) es de 1 millón 403 mil 786 pesos mensuales, mientras que el personal de nombramiento institucional (de menor rango) recibe 646 mil 115 pesos mensuales. Actualmente hay 3 mil 394 jubilados de la PDI, según la información proporcionada por la jefa jurídica de acceso a información pública de la institución, comisario Lorena cuevas.

El economista del Centro de Estudios Nacionales de Desarrollo Alternativo (CENDA), Gonzalo Cid, explica que esto se debe a que las instituciones uniformadas tienen todavía un sistema solidario de reparto, que permite que la totalidad de los ahorros previsionales sean usados sólo para entregar pensiones, no cono sucede con las AFP, donde cada cotizante depende de sus propios ahorros y el sistema propicia que las empresas inviertan el dinero en el mercado de valores.

“El sistema de reparto permite jubilar con menos años de servicio, a diferencia de la ciudadanía que debe extender su trabajo para alcanzar una buena pensión. Los uniformados jubilan al cabo de 15 o 20 años, con pensiones desde los 50 años”, indicó.

A mayor abundamiento, el jefe del departamento de pensiones de DIPRECA, Óscar Ulloa, explica que “no se lleva un registro del monto de las cotizaciones que tiene cada afiliado, por ser un dato no relevante al momento de determinar una pensión”, puesto que este sistema de reparto “no posee capitalización individual, motivo por el cual las pensiones de sus afiliados se determinan en relación con su última renta imponible de acuerdo con los años de servicio efectivos”. El funcionario señala además que “aproximadamente el 95% del gasto en pensiones es financiado con aporte fiscal” y sólo “el saldo restante es financiado con los recursos propios” de los uniformados.

El economista de la Fundación Sol, Marco Kremerman, recuerda que Chile es el único país de Naciones Unidas donde la población civil no tiene un sistema de pensiones según el estándar de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que use los ahorros sólo para entregar pensiones y donde el empleador también esté obligado a aportar.

Kremerman indica que “Chile no tiene sistema de pensión, sino un sistema de ahorro forzoso, no hay un objetivo de entregar pensiones. El sistema depende de la fuerza individual de cada persona, cuya rentabilidad está sujeta a la volatilidad de la economía internacional”.

Importa decir entre los 34 países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Chile es aquel donde las personas se jubilan más viejas: 10 años después del límite legal de 60 años para mujeres y 65 años para hombres.