La Unicef  denunció que diez niños palestinos fueron asesinados en las últimas 24 últimas horas por ataques militares israelíes, que causaron un centenar de muertos en el mismo lapso. Por su parte, la Organización Mundial de la Salud, solicitó la apertura de un corredor humanitario en Gaza para evacuar a los heridos y hacer llegar  medicamentos esenciales a la población. El organismo internacional informó además que desde el inicio de la ofensiva militar israelí  en contra de Gaza, cuatro hospitales del territorio palestino han sido objeto de los ataques. El último de ellos fue el hospital de Al Aqsa el que,  según la OMS, fue  “blanco de un tiro directo que resultó en muertos y heridos, con un daño severo a las áreas quirúrgicas, de cuidados intensivos y del equipamiento para salvar vidas”.

A este hospital, que era el principal del centro de Gaza, se suman  doce clínicas, diez ambulancias, un centro especializado para personas discapacitadas y dos estaciones de desalinización del agua, que han sido destrozados por Israel.

“Cada día, más hospitales, clínicas y ambulancias son dañadas, destruidas y vueltas inservibles, reduciendo más y más la capacidad del sistema sanitario para atender al creciente número de heridos”, manifestó la OMS. Además del cruento  asedio militar israelí al que se encuentra sometido el territorio palestino en los últimos 18 días, la población de Gaza se ha estado literalmente encerrada y  bajo un bloqueo insoslayable por “tierra, mar y aire” desde 2007, diezmando su infraestructura de salud e imposibilitando el acceso de las personas a medicamentos o atención médica.  Situación que se ha visto dramáticamente acrecentada en los últimos días.