Con la presencia de sólo tres senadores de la Nueva Mayoría, Ignacio Walker, Carolina Goic y Jorge Pizarro, se llevó a cabo el homenaje en el Senado al fallecido director de El Mercurio Agustín Edwards, ceremonia liderada por los parlamentarios de la UDI y RN, Hernán Larraín y Francisco Chahuán, respectivamente.
El ex presidente del gremialismo señaló en su discurso que a Edwards muchos lo “demonizaron injustamente”, y por el contrario, aseguró que desde la UDI creen que “don Agustín fue un hombre con un gran sentido patriótico que deja un saldo muy positivo y favorable al hacer un balance de su vida en sus responsabilidades de El Mercurio”.
No obstante, al mismo tiempo que Larraín entregaba sus primeras impresiones, el diputado del Movimiento Autonomista Gabriel Boric, realizó una protesta silenciosa, primero al interior de la Sala, y luego a las afueras de la Cámara Alta en repudio a este homenaje exhibiendo un cartel que mostraba algunas portadas de La Segunda y El Mercurio en las que se negaba las violaciones a los derechos humanos en Dictadura: “Ustedes homenajean el daño y la mentira: nosotros exigimos #NuevaLeydeMedios”, se leía en la pancarta.
En tanto, el Partido Socialista explicó a través de una declaración que decidieron no participar del homenaje: “Creemos que la figura de Agustín Edwards Eastman resulta un claro factor de división para Chile. Edwards fue un actor cuya participación en los procesos sociales de nuestro país estuvo marcada por su rol conspirativo en el golpe de Estado que derrocó al Presidente Salvador Allende y su complicidad con la dictadura de Pinochet”.
Por su parte, el Colegio de Periodistas expresó su rechazo al homenaje, disidencia que expresaron a través de una carta en la cual destacaron “el reconocimiento fehaciente de su rol en la desestabilización y derrocamiento de un gobierno democráticamente electo, que derivó incluso en la clausura por 17 años el Congreso Nacional, no lo hacen merecedor de tal acto”.
Además, desde la organización gremial recordaron la que califican como “la única sanción concreta que Agustín Edwards recibió su expulsión del Colegio de Periodistas de Chile, luego de un proceso sustanciado en el Tribunal Regional de Ética Metropolitano, que fue ratificado por el Tribunal Nacional de Ética y Disciplina”.