En una conferencia de prensa realizada en Perú, la autoridad norteamericana felicitó al dicho gobierno por recibir más de 750 mil venezolanos, país donde dijo, pudo sentir, de primera mano la “crisis venezolana”.

Sin embargo, se incomodó cuando un periodista le preguntó sobre si ello no se contrastaba con la idea de Trump de construir un muro para frenar la migración centroamericana.

A la pregunta el Secretario de Estado de Estados Unidos respondió que “el cien por ciento de los desafíos enfrentados por Perú y Colombia por esos refugiados, es resultado de Nicolás Maduro, Cuba y Rusia. Nosotros tenemos los mismos desafíos, lograr que la gente se quede en su país de origen, ese es el deseo del presidente Trump”.

Dicha declaración se dió en el contexto de una nueva caravana de migrantes con destino a Estados Unidos que llegó hasta México este fin de semana, pese a las amenazas del mandatario estadounidense.

Este domingo Pompeo llegará a Cúcuta, ciudad colombiana fronteriza con Venezuela, donde espera mostrar al mundo que Estados Unidos “está con el pueblo de Venezuela”. “Cúcuta es el lugar donde el mundo se unió, donde se formó una enorme coalición para tratar de llevar comida y medicina a la gente de Venezuela, pero los únicos que se mostraron en contra fueron los rusos, los chinos y Nicolás Maduro”, expresó al Diario El Comercio.

Por otro lado, Steve Mnuchin, secretario del Tesoro estadounidense, anunció la creación de un fondo millonario para apoyar la situación de Venezuela. Este fondo de diez mil millones de dólares se formará con el apoyo de Estados Unidos y otros seis países con los que está trabajando actualmente.

En cuanto al reconocimiento de Juan Guaidó por parte de los altos mandos del Fondo Monetario Internacional, pese a las conversaciones de Mnuchin y su injerencia en Venezuela, la directora del Fondo FMI, Christine Lagarde, afirmó este sábado que no todos están de acuerdo en la organización financiera.

“Sólo podemos dejarnos guiar por los miembros, no es una cuestión de que nosotros decidamos. Tiene que ser una amplia mayoría de nuestros miembros la que reconozca diplomáticamente a las autoridades que contemplan como legítimas y, en cuanto eso pase, nosotros actuaremos”, dijo Lagarde en rueda de prensa luego de la Reunión de Primavera sostenida por los altos mandos del FMI y el Banco Mundial respecto a la legitimidad de Guaidó que se autoproclamó en enero de este año.