En una entrevista, el secretario adjunto de la Congregación para la Doctrina de la Fe dijo que abrió “una caja de Pandora” al recopilar casos que involucran a sacerdotes chilenos.
Terminó la misión de los enviados papales y, entre otras cosas, lo que quedó fueron imágenes de unidad en Osorno y un servicio de escucha para recibir las denuncias que no alcanzaron a tomar
Durante una conferencia de prensa el arzobispo de Malta anunció que a partir del próximo miércoles comenzará a operar una oficina que deberá recibir las denuncias de abusos por parte de la Iglesia Católica.
Estaban todos invitados a reunirse en la catedral de la ciudad, para una misa encabezada por los enviados papales Charles Scicluna y Jordi Bertomeu. Si bien la expectativa de asistencia era baja, la sede se repletó de fieles. Lo que viene ahora para el futuro, anunció el arzobispo de Malta, es un proceso largo de reconciliación. Desde el movimiento de laicos afirmaron que recién se inicia un proceso de sanación.
Los enviados papales, Charles Scicluna y Jordi Bertomeu, se reunieron este viernes con sacerdotes y diáconos de Osorno en el marco de su segunda visita al país.
En conversación con Radio y Diario de la Universidad de Chile, el sacerdote jesuita y Doctor en derecho canónico, Marcelo Gidi, explicó por qué el Papa se ha opuesto a este tipo de peticiones judiciales que involucran a sacerdotes con delitos de connotación sexual.
En el marco de una misión especial encargada por el Pontífice, es que los sacerdotes Charles Scicluna y Jordi Bertomeu han aterrizado nuevamente en Chile para estudiar la crisis vivida por la Iglesia Católica, esta vez con énfasis en la ciudad de Osorno. Con la lectura de una declaración pública en la Nunciatura, el Arzobispo de Malta dio inicio a sus actividades en nuestro país.
Los enviados papales permanecerán en Chile ocho días, los que se dividirán entre Santiago y Osorno. Su misión según señalaron en conferencia de prensa, tiene por objetivo el evidenciar la cercanía del Pontífice con Osorno y el prestar asesoría “técnica y jurídica concreta para las curias diocesanas de Chile”.
Los religiosos enviados por el Papa, vienen en la misión de continuar investigando al obispo Juan Barros y las denuncias en su contra.
Aunque no existen motivos ni fecha para su visita, se especula que podría ser previo a la decisión respecto de la renuncia de los obispos.
Este lunes tuvo lugar la primera rueda de prensa de la Conferencia Episcopal en el Vaticano, previo a la reunión que sostendrá el clero chileno con el Papa por el informe de Charles Scicluna. Ambos voceros –Juan Ignacio González y Fernando Ramos– dijeron que no conocían la información entregada a Francisco antes de su viaje a Chile, además de lanzar otras declaraciones que fueron rechazadas por las víctimas de Fernando Karadima.
El religioso ha sido acusado de ser testigo y ocultado los crímenes efectuados por Fernando Karadima. De manera extraoficial se informó que Barros habría entregado su carta de renuncia al arzobispo de Malta durante los días que estuvo en Chile en el proceso de las audiencias y escuchas a los denunciantes en casos de pedofilia.
En una nueva jornada de escuchas, las víctimas de abusos sexuales de la congregación marista solicitaron una investigación canónica que determine las responsabilidades en los religiosos de los recintos educacionales.
Las complicaciones de salud del Arzobispo de Malta obligaron al enviado del Papa Francisco a ser internado en la clínica de la Universidad Católica y delegar sus funciones en el sacerdote español Jordi Bertomeu.
el vocero de la Conferencia Episcopal señaló que el Obispo es víctima de un malestar que, a estas horas, lo tiene hospitalizado en la Clínica de la Universidad Católica.
Una señal apareció en el panorama luego de la conversación del arzobispo de Malta con Juan Carlos Cruz: la reunión entre el enviado papal y los Laicos de Osorno, que se llevará a cabo este miércoles, no se concretará en la Nunciatura Apostólica –tal como estaba planeada– sino que en una casa vecina ubicada en la misma calle. El gesto les entregó seguridad a los denunciantes de Juan Barros. “Acredita una confiabilidad a los relatos que nosotros vamos a hacer en presencia de él (…) nos parece importante que haya independencia”, dijo Mario Vargas.
Charles Scicluna, enviado por el Vaticano, se encontrará con cinco representantes para analizar las acusaciones contra el obispo Barros.