La intensificación de los ataques de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) sobre posiciones vinculadas a Hezbolá ha provocado la ola de evacuaciones forzadas, en su mayoría personas que huyen de la zona sur del país de Oriente Medio.
La Guardia Revolucionaria iraní advirtió que si el ejército israelí responde a las acciones de Teherán, que consideran en línea con el Derecho Internacional, hará frente a “ataques aplastantes” de represalia.
En total, más de 90 mil personas se vieron forzadas desde el lunes a abandonar sus hogares a causa de los ataques del Estado judío, según un recuento de la ONU de este miércoles.
Tanto las Fuerzas de Defensa de Israel como el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) denunciaron que su contraparte transgredió el trato sobre el alto el fuego.
El Ejército israelí incluye entre estos objetivos cuarteles, centros de Inteligencia, túneles, enclaves de lanzamiento de cohetes y “muchos” milicianos. El conflicto acumula más de 11 mil muertos, entre ellos 4.506 niños, en el enclave palestino.
“Si les preocupa su situación y la de sus seres queridos, diríjanse al sur conforme a las instrucciones”, indicaron los militares israelíes a la población civil palestina.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) aseguraron que en el recinto, ubicado en la ciudad de Yenín, había una célula terrorista de Hamás y la Autoridad Palestina, “que fue responsable de una serie de ataques llevados a cabo en los últimos meses”.