Detenciones arbitrarias, la muerte de bebés y personas inocentes, así como la profundización de la desigualdad social y de género, son algunas de las consecuencias que ha traído consigo la implementación de las medidas excepcionales de Nayib Bukele.
Nayib Bukele cumplió este 1 de junio cuatro años en la presidencia de El Salvador. Una gestión aplaudida por la reducción de homicidios y su guerra contra las pandillas, pero severamente criticada por supuestas violaciones de derechos humanos.
Nayib Bukele, presidente de El Salvador, comienza su cuarto año de gobierno este 1° de junio manteniendo a su país en Estado de Excepción.
Fue el propio alcalde de la comuna de la Región de Tarapacá quien reflotó la idea de la presencia del violento grupo en el país. Sin embargo, el fiscal regional Raúl Arancibia afirmó que “a la fecha no tenemos información al respecto”.
Miguel Montenegro cuestionó que las medidas del Plan de Control Territorial ejecutadas por el Mandatario puedan proyectarse en el largo plazo. “Paradójicamente, la población ya no le tiene miedo a las pandillas, sino que a las FF.AA.”, señaló.
Juntar reos de distintas maras en las celdas, además de no respetar el asilamiento para prevenir el Covid-19. Las medidas alertan a las organizaciones de Derechos Humanos que ven esta “estrategia” como una bomba de tiempo que podría recrudecer los índices de homicidios en ese país.
En El Salvador, el recién elegido presidente Nayib Bukele aseguró que su programa para luchar contra la delincuencia iba a erradicar las pandillas en cuatro años. Una promesa cuyo realismo ya está siendo cuestionado
Derechos humanos, dolor, lucha, pero sobre todo amor y esperanza como canto a la libertad. Así es el trabajo de la española que en más de cuatro décadas de carrera ha llevado sus imágenes, instalando la reflexión sobre el cuerpo, sobre esos cuerpos olvidados y vejados, cuya única esperanza es poder encontrar un mañana mejor.