La norma establece un protocolo de acción en el que “desde el Servicio Médico Legal el féretro se va a ir directo al cementerio”. Además, sanciona con “la pena más alta” los delitos frecuentes que ocurren durante los funerales de alto riesgo.
La norma, aprobada por amplia mayoría, incorpora nuevas restricciones para los funerales de alto riesgo. Al respecto, el diputado Marcos Ilabaca (PS) valoró la aprobación de la iniciativa, pero aseguro que “no es la solución total”.
El mandatario señaló que “por grande que sea la legítima tristeza que causa la pérdida de un ser querido no es aceptable que un funeral obligue a paralizar un barrio entero”. La ceremonia también contó con la presencia del alcalde Rodolfo Carter.
La medida legislativa fue dada a conocer por el secretario de Estado durante la cuenta pública del Ministerio del Interior y Seguridad Pública.