El 2016 el cine chileno propuso varias películas que nos ayudaron a acercarnos a ciertas realidades de nuestra sociedad que, por lo general, no nos gusta mirar de frente. Películas que, inspiradas en hechos reales, se abrieron a personajes y temas que no habíamos visto antes -o por lo menos no con este enfoque- en la producción cinematográfica nacional y que hacen un aporte a complejizar la mirada respecto a la realidad de muchos chilenos y chilenas que mediáticamente hemos dejado en la invisibilidad o ridiculizado y que nos ayudan a reflexionar sobre cómo estamos cambiando como sociedad.
Este jueves, el músico y director estrenó su opera prima “Nunca vas a estar solo”. La película toma el caso de Daniel Zamudio como premisa y construye un relato sobre la violencia homofóbica que, asegura, es sistémica y persiste en nuestro país.
“El motor de la película es el padre desesperado y desesperanzado. Un padre que intenta aferrarse con todo lo que tiene a que la realidad puede ser distinta a la que es. Que no entiende a su hijo, pero que tampoco lo cuestiona”.