El cardenal Francisco Javier Errázuriz calificó como “injusta” la campaña efectuada por tres de las víctimas de Fernando Karadima, quienes a través de una petición web intentan impedir su participación en el cónclave papal, por ser un “encubridor de pederastas” que no tendría la suficiente “calidad moral” para elegir al nuevo representante de la iglesia católica.
James Hamilton, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo acusan a Errázuriz de haber ignorado las denuncias realizadas contra Karadima y haber cerrado una investigación que confirmaba los abusos. Su petición en el sitio change.org cuenta con más de seis mil firmas.
“Me encantaría conversar con esas personas que plantean esas cosas de manera que se dieran cuenta que están equivocadas”, declaró el cardenal en entrevista con The Associated Press. Errázuriz reconoció que las víctimas tienen la libertad de realizar esa solicitud, “pero no será esa la razón por la cual un cardenal no entre a un cónclave”.
El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, también desestimó las críticas al cardenal Errázuriz, a solo un día de realizarse el cónclave que elegirá al sucesor de Benedicto XVI. Ezzati manifestó que pese a no encontrarse molesto por estas acusaciones, le hubiese gustado que se hablara con la verdad “y no sobre la base de suposiciones”.
“La iglesia es Santa y pecadora a la vez”, declaró Ezzati refiriéndose al cónclave de mañana, apuntando a la necesidad de una renovación constante en la institución.