Una serie de críticas se levantaron en contra del primer ministro israelí, Benyamin Netanyahu, luego que en un discurso ante el Congreso Sionista Mundial que se realizó en Jerusalén afirmara que el genocidio del pueblo judío fue incitado por un líder musulmán palestino.
La máxima autoridad de Israel aseguró que el entonces líder musulmán de Jerusalén, Haj Amin al-Husseini, se reunió con Adolf Hitler a quien le dijo que impidiera el éxodo de judíos a Medio Oriente matándolos.
“Hitler no quería exterminar a los judíos en ese momento, quería expulsar a los judíos. Y Haj Amin al-Husseini fue donde Hitler y le dijo: ‘Si los expulsas, todos van a ir a Palestina’. Entonces Hitler le preguntó: ‘¿Qué debo hacer con ellos?’ y el mufti respondió: ‘quemarlos’”, sostuvo Netanyahu.
Y si bien luego de sus afirmaciones Netanyahu se retractó, lo cierto es que sus expresiones fueron criticadas incluso en el propio Israel. El líder de la oposición a su gobierno, Isaac Berzog, sostuvo que de esta manera el primer ministro “trivializa el Holocausto”.
Mientras, en el lado palestino, uno de los integrantes del equipo negociador de la OLP, Xavier Abu-eid, sostuvo que las palabras de Netanyahu absuelven al propio Adolf Hitler de los millones de crímenes cometidos por el Tercer Reich contra los judíos.
“Esto de que fue un palestino el que le dijo que mate a los judíos, no solamente no es una verdad histórica, sino que desmiente también el rol que miles de palestinos jugaron durante la Segunda Guerra Mundial combatiendo contra las tropas nazis, muchos de ellos perdiendo su vida. Había no solamente gente que se enlistó en el ejército británico que en ese tiempo estaba en Palestina, había guerrillas del Partido Comunista palestino que también actuaron. Por ende, el odio del señor Netanyahu simplemente no sólo busca desdibujar la historia, sino que ha llegado hasta el punto que le ha quitado la culpa al mismo Adolf Hitler”, subrayó Abu-eid.
El diplomático palestino agregó que la actitud de Netanyahu es preocupante, pues demuestra que se trata de un gobierno y un Estado genocida que atenta contra la seguridad y la paz en la región y de lo cual debe tomar nota la comunidad internacional.
“No puede ser que el mundo siga teniendo relaciones con Israel como si es que sus violaciones a los derechos humanos no contasen. Evidentemente si bien existe una gran actividad diplomática en estos días –estuvo Ban Ki-moon (secretario general de la ONU) y el viernes se reúne el Presidente Abbas con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, en Amman, Jordania-, independiente de todo eso, acá evidentemente que el gran actor ausente es la comunidad internacional, no en cuanto en declaraciones, sino en cuanto a hechos”, precisó.
El representante palestino comentó además que la comunidad internacional debe propiciar acciones que protejan al pueblo palestino que está bajo ocupación y sometido a una constante violación de sus derechos fundamentales y se deje de tratar a Israel como un Estado que respeta la normativa internacional.