En marzo del año pasado la Universidad de Chile y el Ejército firmaron el Convenio Específico de Cooperación Académica que abría doce cupos para el ingreso de soldados conscriptos al programa de Bachillerato en nuestra casa de estudios.

La semana pasada la Universidad recibió a los dos estudiantes beneficiados, los soldados Carlos Cazorla y Felipe Ramírez, quienes ya iniciaron su año académico.

El Comandante en Jefe del Ejército, Humberto Oviedo, manifestó que ésta asociación estratégica debía ser permanente porque representaba intereses comunes entre ambas instituciones.

“Tenemos el convencimiento que la mejor forma de enfrentar los múltiples desafíos para construir un Chile mejor es de manera conjunta, y de ello surge la necesidad fundamental de desarrollar una asociación estratégica permanente con un fin último: la contribución de progreso del país”, señaló.

Al momento de firmar el convenio, el rector de nuestra universidad, Ennio Vivaldi, dijo que esta iniciativa no sólo permitía estrechar lazos con el Ejército, sino que también generar mayor equidad al incorporar a estudiantes uniformados.

Sin embargo, el ingreso a las escuelas matrices del Ejército sigue siendo restringido. En agosto de 2014, un grupo de parlamentarios ingresó un proyecto que pretendía suprimir las normas que prohíben el ingreso de personas pertenecientes a partidos políticos y organizaciones sindicales a instituciones del Ejército.

Además, solicitaba eliminar los cobros de matrículas, aranceles y póliza de garantía para estudiar en la Escuela de Carabineros, Policía de Investigaciones y Fuerzas Armadas.

El proyecto ingresó a primer trámite de la Cámara de Diputados, pero se archivó y no ha sido discutido.

El diputado comunista Daniel Núñez sostuvo que era deber del Ejército privilegiar el intercambio con las universidades estatales, porque aseguran una formación de carácter laico y pluralista. A su juicio, las Fuerzas Armadas todavía privilegian el intercambio académico con instituciones conservadoras y con sesgos ideológicos.

Además, el parlamentario dijo que en el cónclave que se realizará a fines de marzo, entre la Presidenta Michelle Bachelet y las bancadas de los partidos políticos, propondrán dar urgencia a los temas relacionados con las Fuerzas Armadas para que sean discutidos en la comisión de Defensa.

En 2011 se presentó una iniciativa que propuso modificar el estatuto del personal de las Fuerzas Armadas estableciendo la igualdad de derechos y evitando toda distinción basada en la raza, color, origen étnico, edad, sexo, género, religión, creencia, opinión política y situación social. Sin embargo, también se mantiene sin avance legislativo.