El Presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, aseguró hoy que el gobernante de facto de Honduras, Roberto Micheletti, "no debería estar" en ese puesto y que si deja el poder "habrá una amnistía" para los implicados en el golpe de Estado.

En declaraciones al margen de la cumbre entre la Unión Europea y Brasil que se realiza hoy en Estocolmo, Lula aseguró que el problema de Honduras es claramente su actual mandatario de facto.

Por otro lado, Micheletti dijo ayer que los militares que expulsaron a Costa Rica al derrocado Mandatario Manuel Zelaya pueden ser llevados a los tribunales de justicia.

La Corte Suprema de Justicia admite que emitió una orden de arresto contra Zelaya y que la misma fue enviada a las Fuerzas Armadas para su ejecución, pero aclaró que nunca aprobó su expulsión del país.

Mientras, la presión internacional aumenta en torno al gobierno de facto de Honduras. Micheletti admitió ayer por primera vez la posibilidad de una restitución del Presidente Zelaya y restableció las libertades civiles, que había derogado con la vuelta del depuesto Mandatario al país.