Las duras críticas que realizó el Ministro de Educación, Felipe Bulnes, al presidente del Senado, Guido Girardi, por negarse a desalojar con Fuerzas Especiales a las personas que el jueves pasado ocuparon las dependencias del ex Congreso Nacional en Santiago levantaron polvo en la arena política nacional.

“No voy a comentar respecto a acciones específicas. He sido claro respecto al comportamiento del senador Girardi, quien al no ser capaz de rechazar categóricamente lo que pasó el jueves, no lo pone a la altura del cargo de presidente del Senado que desempeña”, indicó el secretario de Estado.

En la misma línea, el vocero de Gobierno, Andrés Chadwick, sostuvo que “el presidente del Senado no solo amparó y protegió a quienes hicieron esta ocupación completamente ilegal, sino que protegió y amparó a quienes usaron la violencia e insultaron y amenazaron, y agredieron a senadores, diputados y a ministros de Estado. Nunca un presidente del Senado dejó de solicitar inmediatamente el apoyo de la fuerza pública para garantizar que el Congreso funcione normalmente”´.

Por lo mismo, el  oficialismo planteó una censura que quedaría supeditada a una serie de condiciones  para Girardi como que condenara públicamente los hechos, ofreciera disculpas públicas a Felipe Bulnes, estudiara acciones legales por hechos, aumentara las medidas de seguridad del recinto e instruyera sumarios internos.

Ante ello, el senador Girardi indicó que  “si la censura es por desalojar por la vía del diálogo y de la vía pacífica y no de la presión, bienvenida la censura”. Pero además se defendió diciendo que era el ministro Bulnes quien “no estaba a la altura de su cargo por no dar respuesta a las demandas del movimiento estudiantil”.

Este sábado Girardi reiteró su defensa y comentó que “este Gobierno finalmente hizo suya la doctrina de un boina negra, que es el alcalde de Providencia, que reprime primero, amenaza luego y no dialoga”, en referencia a las acciones del alcalde Cristián Labbé contra el movimiento estudiantil.Frente a esta doctrina, tiene que emerger la doctrina de la paz: yo siempre me he inspirado en Gandhi, en la no violencia, ya que el diálogo y la persuasión son siempre los instrumentos que se deben usar primero”.

En la misma línea, la presidenta de la Fech, Camila Vallejo, dijo que las protestas se deben a que el Gobierno hace casi seis meses no responde nada concreto al movimiento estudiantil. “Hay que hacer valer la voz que se alza en pos del derecho a la educación, que no ha sido debidamente escuchada por el Gobierno, el que se empeña a trasladar la discusión a un panel de expertos que nada tiene que ver con este movimiento, representado por actores sociales. Hay una presión legítima que apoyamos, creemos que debe ser tratada no con violencia, sino escuchando, pudiendo llegar a acuerdos en materias de democracia y educación, con todos los mecanismos para tomar decisión en estos temas como lo es un plebiscito”.

Polémica en la Oposición

Sin embargo, el accionar de Girardi no sólo recibió críticas del oficialismo. Mediante un comunicado público, el presidente de la DC, Ignacio Walker, hizo un llamado al líder de la Cámara Alta a “condenar” la ocupación del Congreso.

“El PDC queda a la espera de una condena enérgica de estos hechos de violencia por parte del presidente del Senado. Es deber de la autoridad máxima de la cámara alta velar por la dignidad en el cargo, de él, de los parlamentarios, y de las autoridades invitadas a los trabajos de comisión. Nadie puede arrogarse el derecho de interrumpir el diálogo necesario y valido en las instituciones representativas de la democracia usando la prepotencia como método”, afirma el texto.

Una postura que fue cuestionada por el senador del MAS, Alejandro Navarro, quien incluso afirmó que sería “el fin de la Concertación”, si la falange respalda una eventual censura contra Girardi.

“Es lamentable que en esta circunstancia existan senadores de la DC que evalúen apoyar esta ofensiva de la derecha que busca empatar ficticiamente la moción presentada contra el presidente de la Cámara tras el ingreso de fuerzas especiales para desalojar las tribunas. Si la DC apoya la censura es el fin de la Concertación, pues no hay razones para tensionar a ese conglomerado ni a la oposición por un hecho que no tuvo la gravedad que quieren darle. Nadie agredió al ministro, ni hubo daños. No permitir la entrada de la policía uniformada al ex Congreso no es una falta, sino por el contrario, un símbolo y una señal de tolerancia y respeto hacia los ciudadanos, tolerancia y respeto que no es lo abunda cuando es el gobierno el que trata con los estudiantes y los estudiantes movilizados”, sentenció el parlamentario.

Navarro concluyó que “hechos como los del jueves volverán a repetirse porque en lugar de avanzar en soluciones reales en materia de educación, el Gobierno optó por enviar un presupuesto regresivo, que no se hace cargo de los temas de fondo. Es un presupuesto que en lugar de apaciguar los ánimos, resulta provocador. El ministro Bulnes tiene que estar consciente de aquello”.

Coalición cofirma petición de censura

Finalmente, los jefes de las  bancadas de senadores de Renovación Nacional, Francisco Chahuán y Lily Pérez; y de la UDI, Hernán Larraín y Gonzalo Uriarte, resolvieron pedir formalmente la censura de la mesa de la Cámara Alta.

El senador Chahuán argumentó “no se ha dado cabal cumplimiento  por parte del Presidente del Senado a los compromisos asumidos públicamente en relación a los hechos ocurridos el jueves, por tanto  hemos decidido en conjunto censurar a la mesa presidida por el senador Girardi”.

Y la decisión no cayó bien entre la oposición. El jefe de la bancada de senadores del PPD, Jaime Quintana, señaló este sábado que“es paradójico que en un país que ha perdido la capacidad de diálogo y esta enfrentando un aumento en el clima de violencia, se pretenda censurar a quien opta por dialogar”.

“Un desalojo del Senado hubiese sido una postal imborrable para graficar el autoritarismo del gobierno, no creo que esa imagen del país quiera proyectar la derecha. Al Ejecutivo le queda una sola carta: el Congreso, y en una semana se la farrea”, sostuvo Quintana y agregó que “el hecho es que hubo una manifestación en el Congreso, y lo que ocultan es el tema de fondo. Nosotros, a diferencia de ellos, preferimos el camino del diálogo en vez de la represión y los desalojos forzosos, nosotros somos distintos, y no creemos que el conflicto social se vaya a resolver con represión”.