Incertidumbre existe entre las autoridades de Gobierno que se aprestan a llegar a la zona y también quienes ya están en la Región de Aysén. Este equipo reforzado del Ejecutivo deberá, en el transcurso de la tarde, retomar las conversaciones con el Movimiento Social de Aysén, quienes a esta hora se reúnen en la Cámara de Comercio se esa región para ver si reanudarán el diálogo  o no.

La duda obedece a la propuesta de trabajo realizada ayer por La Moneda, la que contempla avanzar con mesas técnicas en Coyhaique y en Puerto Aysén.

Una de estas mesas se realizó en horas de la mañana encabezada por el subsecretario de Pesca, Pablo Galilea, encuentro que fracasó pues la exigencia de los dirigentes es que avanzarán sólo cuando se solucione el tema de los combustibles.

Al término del encuentro, el subsecretario Galilea comentó que “este es un trabajo de comisiones, los pescadores con los pescadores, los transportistas con los transportistas y así sucesivamente, pero quienes definen – y queremos ser muy respetuosos de ello – es la mesa de los 24 y lo que pudiéramos haber conversado hoy, finalmente lo resuelve esa instancia que es la que debe aceptar, rechazar o cuestionar los planteamientos que el gobierno haga”.

Las otras comisiones propuestas para esta tarde son las de Combustibles y Zona Franca, a cargo del subsecretario de Hacienda, Julio Dittborn, y el ministro de Energía, Claudio Álvarez, y de Transportes, liderada por la subsecretaria de esa cartera, Gloria Hutt.

Esta metodología de trabajo despertó críticas en los dirigentes aiseninos, ya que acusan es un intento que busca dividir el movimiento.

“Queremos hacer la pega en Aysén, como lo hemos planificado. Queremos trabajar todos juntos como mesa, los 24 dirigentes”, sostuvo uno de los voceros, Iván Fuentes.

A esto Jorge Lara agregó que “podemos trabajar por separado en el mismo edificio, pero no en diferentes ciudades, porque no queremos que nos dividan, queremos que todo se haga en Puerto Aysén”.

Preocupación que fue aclarada por el subsecretario Claudio Alvarado, quien señaló que las negociaciones son con la Mesa Social de Aysén y que el trabajo mediante comisiones técnicas obedece a una cuestión netamente metodológica.

Una de las tareas que se debería abordar, en caso de que las negociaciones se reanuden, tiene relación con la propuesta hecha por el Ejecutivo en materia de combustibles. Ésta consta de subsidiar el transporte de bencina y petróleo, en un 50 por ciento hacia la región y en un 70 por ciento al interior de Aysén, lo que, según el Movimiento Social de Aysén, se traduce en una reducción real de 8 pesos por litro.

Por ello la demanda más fuerte de los aiseninos es avanzar hacia la creación de una Zona Franca para la región, petición a la que el Gobierno no le ha cerrado ni abierto la puerta pues, según dicen, necesita de modificaciones legislativas.

Estas tributaciones especiales y extensiones de impuestos sólo se pueden hacer mediante proyectos de ley, por esta razón es que el conjunto de las bancadas parlamentarias de la Concertación entregaron su apoyo a las demandas de Aysén.

El diputado socialista Marcelo Schilling señaló este punto es la puerta de entrada para solucionar el resto de las peticiones. “La demanda más importante tiene que ver con los combustibles y la solución da una opción para resolver el resto. En algunos casos se podrá avanzar hasta el total de las demandas, en otros no o simplemente desestimarlas porque son inviables, pero para crear el buen ambiente en las conversaciones, lo esencial es el tema de los combustibles”, dijo el legislador.

Para finalizar, el vocero del Movimiento Social de Aysén Misael Ruiz aseguró no saber si va a fracasar la mesa, “nosotros tenemos la mejor disposición al diálogo. Ellos nos pidieron de todo, desbloqueo de camino, funcionamiento de la región y todo lo dejamos, porque supuestamente cuando vino el ministro Álvarez a la región traía más de 50 propuestas a la región”, afirmó.

“Desbloqueamos el camino, nos sentamos a conversar y el ministro no traía absolutamente nada”, sentenció Ruiz.