Los voceros del Movimiento Social de Aysén reiteraron su voluntad de diálogo el martes por la noche, después de una confusa jornada en la que se negaron a conversar por separado, como estipulaba el cronograma propuesto por el subsecretario de la presidencia, Claudio Alvarado.

“Nuestra disposición a conversar está asegurada” afirmó el vocero Iván Fuentes y afirmó que el movimiento se abrió a la posibilidad de viajar este miércoles a Coyhaique, pero advirtió que una gran cantidad de personas podría llegar al encuentro, por lo que “si el Estado quiere hablar con cerca de 500 personas al mismo tiempo es su problema”.

Además agregaron que quieren conversar con el Ejecutivo, pese a  saber que no se entregará el 20 por ciento de subsidio al combustible de forma directa como estaban solicitando.

Debido a esto, afirmaron que le van a cobrar la palabra al ministro de Energía, Rodrigo Álvarez,  sobre la creación de una zona franca para la totalidad de la región que contemple también el descuento del IVA a los combustibles como, aseguran, fue incluido en la primera propuesta que las autoridades presentaron.

Esta fue la postura de los dirigentes después de sostener una reunión con los economistas Franco y Antonio Parisi quienes los asesoraron.

Por otro lado, los senadores de Aysén Patricio Walker de la Democracia Cristiana y Antonio Horvath de RN se refirieron a los sondeos que muestran sobre un 80 por ciento de reprobación al manejo del Gobierno del conflicto en la región.

“Esto confirma que el Gobierno ha tenido un manejo sumamente errático en Aysén” porque “ha cambiado permanentemente las reglas del juego”, sostuvo Walker y añadió que la fórmula con la cual se han ido previendo y solucionando los conflictos tiene que ser corregida.

Por su parte el senador Horvath indicó que esto es un llamado de atención para tener más sintonía con las regiones y realizar una verdadera regionalización.

De esta manera, se espera que los dirigentes lleguen todos a Coyhaique, lo que ha generado el escepticismo del titular de Energía, quien sostuvo que el modelo asambleario es poco útil para discutir temas complejos. Así se siguen complicando las cosas en Aysén cuando el movimiento ciudadano ya cumple un mes.