El apoyo a las demandas del movimiento estudiantil, el rechazo al proyecto de ajuste tributario y las críticas que la Concertación ha realizado a los supuestos logros del Gobierno provocaron fuertes cuestionamientos desde parlamentarios de la Alianza.
A estos hechos se sumó la apertura del presidente de la Democracia Cristiana, Ignacio Walker, a realizar una Asamblea Constituyente para modificar el marco normativo fundamental del país.
Al término del comité político de los lunes en La Moneda, el senador RN Alberto Espina calificó este gesto como “otro triunfo claro de la izquierda dura al interior del bloque opositor”.
“Lamentablemente, tenemos la convicción de que la DC está bajando los brazos, prefiriendo sumarse a la corriente de izquierda y no asumir un rol constructivo. Las asambleas constituyentes se hacen de dos formas en los países: una es a través de un golpe de Estado y yo no puedo creer que alguien tenga interés de que en Chile se produzca un golpe de Estado; y la otra es que el Congreso se autodisuelva, lo que significa además violar gravemente nuestra institucionalidad”, afirmó.
Por su parte, el jefe de la bancada parlamentaria de RN, Alberto Cardemil, dijo que la Concertación “se ha ido transformando en una maquinaria de agitación social y en un elemento falsificador de los logros del Gobierno”.
Además, el diputado expresó que “se evidencia un giro a la ultraizquierda de la Concertación que es grave, peligroso y preocupante”.
“Hay una obediencia casi ciega a las pautas que llegan del Partido Comunista y sus líderes y se empieza a plantear -y a esto se ha sumado la rendición de la DC a los dictados de la ultraizquierda- pasar por encima de la institucionalidad y avanzar a formas de democracia populares, como eufemísticamente se las llama, asambleas populares anárquicas que remplacen las instituciones de la Constitución, que se han mantenido y perfeccionado durante estos años de transición”, dijo.
En tanto, el presidente del Partido Socialista, Osvaldo Andrade, reaccionó a estas palabras afirmando que los legisladores de la Alianza “le tienen miedo a la democracia”.
Sobre la apertura a realizar una Asamblea Constituyente para modificar la Constitución expresada por Walker, el diputado socialista dijo que “es un tema que el bloque opositor no ha discutido en detalle y que sólo se ha planteado en algunas reuniones de manera tangencial”.
Eso sí, el parlamentario dijo que una nueva Constitución es parte de la hoja de ruta que los presidente de la Concertación elaboraron el año pasado y que su partido tiene la herramienta clara para ese objetivo: “Los socialistas ya hemos expresado nuestra opinión y no la hemos cambiado, así que nos parece bien que otros se sumen a esta perspectiva. En su oportunidad, constituimos un grupo de trabajo sobre la reforma al sistema electoral y tenemos prevista la configuración de múltiples equipos de trabajo respecto a los compromisos del 5 de octubre. Entre ellos está, por cierto, la reforma al sistema político”, señaló.
Desde la DC, el senador Jorge Pizarro le restó importancia a lo expresado por su presidente y afirmó que “no es un tema prioritario ni para el partido ni para el país”.
“Lo fundamental es que seamos capaces de hacer las reformas políticas para tener una democracia mucho más participativa y representativa. Eso pasa por un cambio al régimen político, una descentralización y regionalización en serio, más profunda, y también por un cambio al sistema electoral. ¿Cómo se hace eso? Con un acuerdo muy amplio. Si se puede hacer desde el Congreso, mejor. Si no, recién ahí uno se puede plantear la posibilidad de plebiscitar o hacer algún otro tipo de Asamblea Constituyente”, aseveró.
El diputado del PPD Joaquín Tuma valoró las palabras del senador Walker y aseveró que el Parlamento debe escuchar la voz de la ciudadanía.