“No hay triunfo sin RN” fueron las palabras que el candidato de la Alianza, Pablo Longueira, pronunció durante la cita que sostuvo con la bancada de senadores de ese partido.

El gesto era claro, era necesario relajar el ambiente luego del fuerte “impasse” que se vivió en la UDI, entre el ex candidato Andrés Allamand y el jefe de campaña de Longueira, Joaquín Lavín, que casi terminó a los golpes y con el ex ministro de Defensa insultando al ex titular de Desarrollo Social.

Pero las palabras de buena convivencia del abanderado oficialista no bastaron para tapar la grieta que quedó entre ambos partidos. Ya lo había anticipado el secretario general de RN, Mario Desbordes, al señalar que no iba a ser fácil recomponer las diferencias, pero que existía la voluntad de parte de RN de trabajar en la candidatura de Pablo Longueira.

Y fue precisamente esa la señal que la bancada de senadores de RN quiso manifestarle a Pablo Longueira, pero que finalmente no fue replicada por la bancada de diputados, que optó por posponer el apoyo hasta la próxima semana.

El Jefe de la bancada, Pedro Browne, afirmó que no respaldarán públicamente al actual candidato presidencial hasta después de la reunión del próximo lunes que sostendrán con Allamand “queremos esperar hasta hablar con él, es nuestro líder natural y obviamente pretendemos establecer algunos lineamientos antes de sentarnos a conversar con la UDI”, afirmó el parlamentario.

Las reuniones con los parlamentarios de RN no sólo serían requeridas desde el comando de Longueira, sino también de La Moneda, donde se han comunicado vía telefónica con los diputados para conocer “los ánimos” luego de la derrota en las primarias y buscar unificar el apoyo al candidato único del oficialismo.

Desde la bancada de RN aseguran que las relaciones con el Ejecutivo quedaron “tensionadas”, puesto que afirman que “no hubo un apoyo esperado o neutralidad normal” ante las candidaturas presidenciales a primarias, primero a favor de Laurence Golborne y luego a Pablo Longueira.

Por su parte el senador y presidente del partido, Carlos Larraín, se refirió a la conformación de la planilla parlamentaria, donde aseguró, restan por los menos 12 cupos por dirimir.

Solicitan alejamiento de Lavín

La directiva de RN, a través de su vicepresidente Cristian Monckeberg, dijo esta tarde que “claramente la relación de Joaquín Lavín con Renovación Nacional no es la óptima”, y pidió a la UDI nombrar a otra persona para dialogar.

“El partido obviamente acepta los resultados de las primarias y queremos apoyar con fuerza la candidatura única de la Coalición a esta elección presidencial. Por lo tanto, vamos a estar trabajando con Pablo Longueira, de la misma manera que lo hizo la UDI con Sebastián Piñera para que fuera Presidente de la República”, apuntó.

Monckeberg explicó que “tenemos cuatro meses por delante cuesta arriba, pero creemos absolutamente en la posibilidad de un triunfo y en eso estamos absolutamente comprometidos. Pero para que eso se logre, tiene que haber conversaciones con los partidos, tiene que haber cariño, aprecio y tiene que haber equilibrio, porque es la única manera cuando hay una asociación voluntaria de personas es que todos se integren de buena forma”.

“Para que eso se produzca –continuó- necesariamente tienen que conversar las directivas de ambos partidos, tiene que haber un clima de confianza para enfrentar de buena manera los que es la campaña presidencial en estos cuatro meses que se vienen”.

Luego de esto, fue tajante: “Si hay algo que recomendar a la candidatura de Pablo Longueira es que converse con Renovación Nacional otra persona. Eso va a facilitar muchas cosas”.

“El candidato es uno: Pablo Longueira. Las personas que conversan son absolutamente removibles a otras funciones. Yo creo que sería más oportuno que con Renovación Nacional conversen otras personas”, finalizó Monckeberg.

Impasse en la UDI

Durante esta jornada se reveló un impasse ocurrido durante la celebración del candidato de la UDI Pablo Longueira, luego de confirmarse su triunfo en las primarias.

Diversas versiones de prensa indican que al momento de arribar Andrés Allamand a la sede de la UDI, se produjo un altercado de consideraciones con el jefe del comando gremialista, Joaquín Lavín.

En la ocasión, Lavín le insistió a Allamand para que cumpliera lo acordado previamente y subiera al balcón junto a Pablo Longueira para entregar una señal de unidad. Allamand no quería hacer eso y se acercó iracundo hacia Lavín y apuntandolo con el dedo lo increpó y según lo mencionado por varios testigos le dijo “Hasta cuando vas a humillarme conchetumadre”.

Luego de esta tensa situación, algunos ministros de Estado impidieron que el tema pasara a mayores y alejaron a Allamand del lugar.