Un aumento sostenido en la subcontratación se ha visto desde 2010. El alza, de cuatro puntos porcentuales, eleva la cifra de subcontratados en el país a un 12,2% de los trabajadores, según confirmó estudio elaborado por la Secretaría General de la Presidencia (Segpress).
Otros de los datos presentes en el informe destacan que los trabajadores contratados por una empresa principal, ganarían –en promedio- un 27% más que los subcontratados, siendo ésta concentrada “en personas con menor capital humano, con menos años de experiencia”.
Así lo confirma la abogada laboralista María Eugenia Montt. La académica de la Universidad de Chile sanciona este tipo de contratación que “generalmente alcanza a la población más vulnerable del país”, y señala que “no permitiría la subcontratación, es un sistema discriminatorio y elimina la igualdad. Impresiona un sistema que no es necesario y es sólo acorde con el modelo económico. Ha eliminado los sindicatos y negociación colectiva, llega a atomizar una empresa si tienes a todo el personal subcontratado”.
El informe explica el fenómeno de la contratación indirecta como un producto del “cambio de sistema productivo relacionado con la especialización”.
Norberto Díaz, vicepresidente de la CUT, comparte el diagnóstico de que la subcontratación es un “fenómeno mundial producto del sistema neoliberal”. Para los trabajadores, lo peor de esta forma de contratación sería la “individualización de la negociación y precarización del empleo”.
El dirigente señala que “la subcontratación se ha usado para disminuir responsabilidades, abaratar costos y particularmente de reducir gastos a nivel laboral. Es sinónimo de tercerización, y elude la responsabilidad del empleador, con el consiguiente menoscabo de los trabajadores”.
“Un piso mínimo sería prohibir la subcontratación en el giro principal de la empresa. Si es verdad lo de la mayor especialización, no se explica por qué se subcontrata el giro principal para lo que la empresa se crea” dijo la antropóloga, Karina Narbona, quien destaca que “hay una incongruencia mayúscula, una de las primeras medidas para eliminarla. Esto fue creado en dictadura y no se mejoró en democracia, no se ha eliminado la posibilidad de subcontratar con el giro principal de la empresa, lo que genera empleados de primera y segunda categoría”.
De acuerdo al Instituto Nacional de Estadísticas (INE) 826 mil puestos de trabajo se han creado entre marzo de 2010 y agosto de 2013, de ellos, un 45,5% corresponde a subcontratación.
“De considerarse los nuevos asalariados, de los últimos 41 meses, esa cifra llega al 60,2% y de hacer un zoom mayor, y ve dentro de los asalariados, cuántos de los empleos de mujeres son tercerizados, las cifras suben a un 80%” apuntó Karina Narbona, desmenuzando las cifras entregadas por el Ejecutivo.