El desglose del Presupuesto 2014 permitió conocer la orientación que el actual Gobierno le entregó a la ejecución del erario estatal para el próximo año. En ello, llama la atención la reducción que sufren los servicios fiscalizadores, organismos que están entre las instituciones mejor evaluadas en la actual administración, las que verán reducido su financiamiento.

Por ejemplo, el Servicio de Impuestos Internos experimenta una baja de 3,1 puntos en comparación al año 2013, una reducción que se suma a los recortes sucesivos que experimentó durante los últimos cuatro años. Por su parte, el Servicio Nacional del Consumidor baja su base financiera en un 3,7 por ciento, con sólo 8 mil 747 millones destinados para el próximo año.

En el Parlamento, este es un factor que se sumará a la accidentada discusión que se vive en la Cámara de Diputados, previo al receso de un mes que se inicia el 17 de octubre.

El diputado Pablo Lorenzini reaccionó con extrañeza ante la intención del Gobierno por estos recortes: “Hay una intencionalidad extraña en áreas que nos parecen importantes. Está bien salud, educación o seguridad ciudadana, pero todo lo que es fiscalizar, controlar y dar transparencia a la ciudadanía debiera potenciarse, y no lo vemos así, lo que no tiene lógica. Deberíamos potenciar esas áreas, llegando a todos los ámbitos, cubriendo todo el país”.

En el caso de Impuestos Internos, los dirigentes recalcan en la falta de fiscalizadores y equipamiento. Por ejemplo, en la OCDE, los países cuentan con un promedio de un fiscalizador por cada 700 empresas, mientras que Chile tiene un funcionario por cada 2 mil 400 empresas.

En esta línea, el presidente de la Asociación de Funcionarios de este servicio, Juan Apablaza, indicó que es necesario sumar financiamiento para potenciar la recaudación tributaria para el Estado: “Se abre una brecha muy grande en dineros para capacitación y fiscalización, para así potenciar el servicio. La contratación es mínima, entonces el recorte es una muestra equívoca, que despotencia la acción fiscalizadora de servicios que son tan importantes”.

Apablaza graficó que Chile tiene un fiscalizador por cada 4 mil 200 trabajadores activos, mientras que el promedio de la OCDE apunta a la mitad de esa cifra. A nivel de equipamiento, señala que las condiciones son mínimas, incluso sin acceso a programas especializados para registro contable.

Por su parte, el Sernac es otro de los servicios con baja financiera, órgano que recibirá 8 mil 747 millones, un 3,7 por ciento menos, golpeando con ello los fondos concursables para asociaciones de consumidores.

El presidente de Conadecus, Hernán Calderón, indica que esta baja no se condice con el éxito que tuvo Sernac durante esta administración: “El Sernac necesita más presupuesto, y no disminuirlo. El rol que ha cumplido es importante, las asociaciones también necesitan de ello. Es muy extraño que el Gobierno que ha resaltado ese rol, sea el que hoy disminuye el presupuesto”.

La Superintendencia de Casinos verá disminuido su presupuesto en un 0,4 por ciento, y su par de Pensiones lo reduce en un 0,8 por ciento. Esto contrasta con los casi 4 mil millones de pesos destinados a la mantención de La Moneda y Cerro Castillo, o los casi 600 millones de pesos destinados a la ceremonia de cambio de mando, el próximo 11 de marzo.