A menos de dos semanas de que Michelle Bachelet se instaló en La Moneda, diversas organizaciones ciudadanas concretaron la primera gran movilización del año, denominada la “Marcha de todas las marchas” y cuya gran demanda apuntó a exigir una nueva Constitución Política, que según los organizadores, debe emanar desde la sociedad civil a través de una Asamblea Constituyente.
Con una participación transversal y más de 40 organizaciones convocantes, destacaron la presencia del Movimiento por la Integración y la Liberación Homosexual (Movilh), el Consejo de Defensa de la Patagonia, la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), la Asociación Ciudadana contra el Lucro en la Salud, el Consejo de Todas las Tierras, la Agrupación de Estudiantes Estafados por el Crédito Corfo, entre otras, además del diputado Giorgio Jackson, ex presidente de la FEUC.
El mensaje de todas ellas se repitió antes y durante la marcha, al insistir en el carácter pacifista de la actividad y en que no se toleraría ningún tipo de actos violentos, para lo cual se planificó con Carabineros una coordinación directa.
En ese contexto, el vocero del Movilh, Oscar Rementería, aseguró que “una nueva Constitución vía Asamblea Constituyente puede solucionar los problemas de toda la diversidad de organizaciones que existe en nuestro país”, aclarando que “no es una manifestación en contra o a favor de Bachelet, es sólo un llamado de atención a la clase política para que sepan que hay demandas ciudadanas”.
El trayecto se inició alrededor de las 14:30 horas desde Plaza Baquedano, donde miles de personas comenzaron la caminata por la Alameda hasta Miraflores, desde donde enfilaron hacia el Parque Forestal para concluir en el frontis del Museo de Bellas Artes, donde se desarrollaron diversas actividades artísticas y culturales.
Alrededor de las 17:00 horas, mientras los participantes disfrutaban de la música, algunas cuadras hacia el poniente, cerca de la Estación Mapocho, un pequeño grupo integrado por encapuchados y barristas de Colo Colo generaron incidentes aislados que fueron controlados por miembros de Fuerzas Especiales de Carabineros.
El intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, confirmó que “durante el transcurso de la marcha no hubo disturbios ni destrucciones y, muy por el contrario, se desarrollaron actividades festivas, alegres y familiares”, agregando que “como siempre hubo algunos encapuchados, los que fueron debidamente controlados por Carabineros, y que para nada empañan la masiva y pacífica convocatoria”. Además, concluyó que “con esto se demuestra que manifestarse en Chile es un derecho que se puede ejercer en paz”.
Respecto de la asistencia, desde el Movilh aseguraron que la convocatoria reunió a 150 mil personas, mientras que el balance de Carabineros arrojó una cifra de 25 mil.
Cabe recordar que los vecinos del Parque Forestal presentaron en la antesala de la marcha un recurso de protección para impedir que los manifestantes transitaran por ese barrio, el que fue rechazado por la novena Sala de la Corte de Apelaciones.
Fotografías: Marianne Deygout