Según información entregada por el seguro de salud Fonasa, la lista de espera AUGE superaría las 170 mil personas. Cifra abultada considerando que solo hace dos años, el ex ministro de Salud Jaime Mañalich dio por finalizada la espera de pacientes.
Ya hace bastante tiempo Contraloría se pronunció al respecto, señalando que el 44,5% de ellas se eliminaron solo de manera administrativa.
La información actualizada fue entregada por la nueva directora de Fonasa, Jeanette Vega, quien llegó a este balance reincorporando aquellos casos que no fueron atendidos por problemas de inasistencia o de gestión del hospital.
Para Esteban Maturana, presidente de la Confusam, la cifra entregada por la ministra no sorprende, ya que hubo una evidente manipulación de datos por parte del gobierno anterior.
Maturana señaló que es esencial que se transparente la información para que la población se haga una opinión de la gestión de los gobiernos.
“El sistema público no está en condiciones de tener lista Auge cero, básicamente por un sistema de recursos. Si seguimos desangrando el sistema comprando prestaciones al privado, no estamos avanzando en la dirección correcta”, señala.
El dirigente de la salud agregó que debiera existir un organismo externo que realice auditorías autónomas, independientes del gobierno de turno.
En la misma línea, Elizabeth Vera, presidenta de la Asociación de Usuarios de la Salud indica que la información debe ser entregada por organismos externos y autónomos, como Contraloría.
La dirigente apunta que “ellos bajaron el número, pero no fueron reales esas atenciones, fueron realizadas por médicos generales y no especialistas. No se cumplió el protocolo, la persona no se puede eliminar de una lista de espera si no ha sido vista por un especialista, y eso fue lo que pasó”.
Para Camilo Bass, presidente de la Agrupación Nacional de Médicos de Atención Primaria, se debiera fortalecer el funcionamiento de los consultorios para desconcentrar la carga de especialistas.
“No se está generando que el médico de atención primaria pueda resolver más de lo que hacemos. Esto significa que si no atacamos ese problema en la base del sistema, en la consulta, vamos a formar miles de especialistas para resolver problemas que pudieron abordarse en los consultorios”, indicó.
Peor aún, la lista de espera de enfermedades no garantizadas legalmente alcanza la cifra de un millón 300 mil respecto de consultas, y más de 105 mil sobre sobre cirugías.