Sienten que se les vuelve a “golpear la puerta en la cara”, ya que descubrieron que el ansiado hospital de Ancud no está contemplado en la cartera de inversiones de este Gobierno.
Michelle Bachelet era ministra de Salud del entonces presidente Ricardo Lagos cuando se decidió priorizar a Ancud y se planteó la necesidad de construir un hospital para la zona, proyecto que se paralizó.
En 2011 una movilización surgida desde Quellón, ante la falta de médicos especialistas, reactivó el tema, por lo que el gobierno de Sebastián Piñera retomó el proyecto. El vocero fue el mismo titular del ramo, Jaime Mañalich, quien viajó personalmente a Ancud, donde se comprometió a concretar la construcción del hospital.
Los plazos fijados contemplaban iniciar la licitación de obras civiles el 24 de noviembre de este año, mientras que la construcción desde febrero del 2015. Pero nada de eso será factible, porque no hay fondos hasta, al menos, el 2018.Desde el sábado pasado se declaró estado de movilización en Ancud y ya se han realizado manifestaciones y cacerolazos.
Daniel Pantoja, presidente de la Junta de Vecinos Rurales, afirmó que esto ha sido “un balde de agua fría”, porque nunca se imaginaron que un proyecto tan anhelado por la comunidad, desde hace más de 30 años, y prometido por diferentes gobiernos, se iba a cancelar. “Menos después de que la municipalidad hubiera comprado el terreno, de haber pasado todos los filtros y estar listo para su ejecución a partir del primer trimestre del 2015”, detalló.
El dirigente afirmó que consideran la postergación como “una burla” y añadió que también afecta a los vecinos de Quemchi, quienes se atienden en Ancud.
Asimismo, Pantoja indicó que esto pasa por el excesivo centralismo, cuando se toman decisiones desde miles de kilómetros, sin considerar la realidad de la gente común y corriente. Para él, este capítulo evidencia una vez más la crisis de la política, ya que “muestra que las autoridades políticas están desconectadas”.
Vesna Yurac, arquitecta del departamento de Recursos Físicos del Servicio de Salud Chiloé, afirmó a medios locales que el calendario del gobierno anterior es “tremendamente estrecho en los plazos”, y aseguró que la comuna se vio expuesta a falsas expectativas producto de un “facilismo comunicacional”.
Por su parte, el concejal independiente Rodolfo Norambuena afirmó que transferir la responsabilidad al gobierno anterior no corresponde y añadió que no tiene ninguna culpa por los errores comunicacionales o de cualquier tipo de uno u otro gobierno.
“Son 14 años esperando un nuevo hospital para nuestra comuna, un hospital normalizado, lo que implica no solo infraestructura, sino que recursos humanos y tecnología”, explicó, junto con reconocer que han “perdido la calma”.
En tanto, desde otras ciudades de la Isla Grande están atentas al movimiento y afirman que continúan con carencia de personal.
La situación no es extraña en regiones y responde a un escenario generalizado en el país, tal como lo planteó en el programa “Cambio de Switch”, de nuestra emisora, el presidente de la Agrupación de Médicos de Atención Primaria, Camilo Bass.
El especialista señaló que la mayoría de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) privilegia una atención primaria fuerte, que contemple prevención, promoción de salud y educación de la comunidad. Además, tienen un estándar de un médico por cada mil 200 a dos mil personas máximo.
“Un sistema así de alguna forma genera que la población tenga un médico con nombre y apellido para recurrir cada vez que lo necesita. Algo que en Chile no tienen más de 13 millones de personas”, aseveró.
Asimismo, Bass afirmó que la contratación de 33 mil horas es una de las medidas para los primeros 200 días de mandato, lo que está en vías de implementación. “Nosotros creemos que es bueno que el Gobierno reconozca que es necesario contar con más especialistas”, sostuvo.
Sin embargo, igualmente se seguiría por debajo de lo que es la media de la OCDE, a lo que se suman las falencias en formación y capacitación, entre otros aspectos.
En cuanto a Ancud, los dirigentes señalan que no basta con reunirse con autoridades locales, por lo que no depondrán las movilizaciones hasta que la ministra Helia Molina no visite la ciudad con soluciones concretas.
Cabe destacar que este miércoles y jueves trabajadores de la salud pública se encuentran paralizados para exigir mejores condiciones laborales.