Este miércoles, el diputado socialista Juan Luis Castro concurrió a la Contraloría General de la República. Su intención es que el organismo realice una investigación para determinar si existió soborno y cohecho hacia funcionarios públicos por parte de la empresa informática Saydex. Esto, con el objetivo de obtener convenios y ganar licitaciones en hospitales y consultorios del país.
El parlamentario argumentó que “ya sabemos por la auditoría del Ministerio de Salud que hay 22 mil millones de pesos pagados a esta empresa, que corresponderían a 14 Servicios de Salud que reconocieron que contrataron dichos servicios”.
“Se ha pedido investigar todos los hospitales y consultorios del país donde la empresa Saydex ha vendido sus servicios, para ver en qué condiciones se han adjudicado las licitaciones. Y si hubo interferencia o facilitación de terceras personas, como ocurrió en el caso del Servicio Central, donde aparentemente existió un soborno o cohecho por parte de Mauricio Valero, gerente de Caval en el año 2012”, explicó.
El mismo diputado aseguró que los responsables de Caval no trepidaron en hacer daño al patrimonio fiscal, recurriendo al soborno para generar dineros mal habidos.
En este sentido, Caval habría actuado como una especie de broker, para acceder a beneficios y utilidades para empresas privadas.
“Presuponemos que para una misma empresa, para un servicio, aparecieron estos intentos de soborno, porque no podría haber ocurrido con la misma empresa en otros servicios públicos, en que se hicieron las mismas operaciones. Y eso es lo que estamos solicitando que se investigue”, detalló.
Es importante considerar que a partir de esta situación se abre una arista impensada, donde Mauricio Valero, representando a Caval, hizo crecer un negocio mediante prácticas reñidas con la probidad, a partir de la necesidad de disponer fichas clínicas digitalizadas en el sistema público de salud.