Como un avance en la discusión de la educación superior que Chile merece, calificaron distintos actores políticos y sociales la aprobación de la ley corta que, en concreto, establece que las 16 Universidades estatales deberán someterse a un programa de fortalecimiento para que su acreditación institucional alcance al menos cuatro años, los mantenga o mejore, tarea para la que se destinaron 5 mil millones de pesos.
Además, la ley estableció que podrán optar a la gratuidad las Universidades no estatales que tengan más de 4 años de acreditación y que sus “controladores sean personas naturales o jurídicas sin fines de lucro”.
Además, para los Centros de Formación Técnica e Institutos Profesionales, habrá tres tipos de Becas Nuevo Milenio: La primera consta de un monto de 700 mil pesos y es para todos los alumnos; la segunda contempla un monto de 850 mil pesos para planteles con menos de cuatro años de acreditación y sin fines de lucro; y la tercera entrega un monto de 900 mil pesos a instituciones con cuatro años de acreditación y que no tengan fines de lucro o que se comprometan a cambiar su personalidad jurídica.
Además, la ley contempla un artículo transitorio que permitirá establecer el ingreso gradual de los CFT e IP a este beneficio, estableciendo que en un plazo de 3 años dichos planteles deberán ingresar en el sistema de gratuidad.
La Presidenta Michelle Bachelet valoró la aprobación de la ley, que en su concepto permite que el talento y el esfuerzo definan la condición económica de cada cual y no la situación económica de sus padres.
“Ayer como país dimos un paso importante en el camino de la gratuidad de la educación superior, un paso que hace tres años atrás era impensable y parecía imposible de realizar, y este 27 de diciembre, cuando los chiquillos tengan que postular, van a poder elegir los lugares y acceder a la gratuidad las y los jóvenes pertenecientes al 50 por ciento más vulnerable y que estudien en instituciones que cumplan condiciones de gratuidad y que no tengan lucro”.
Por su parte, la ministra de Educación Adriana Delpiano indicó que si bien son menos alumnos de los planteados originalmente en la gratuidad, las becas mejoraron y que es el país quien gana, porque se repone la idea de que se puede estudiar de forma gratuita y emparejar la cancha, lo que permitirá que muchos jóvenes talentosos no deserten de sus estudios.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Santiago, Marta Matamala, reconoció que el financiamiento mediante aportes basales a las universidades del Estado representa un avance en relación con el sistema educacional que hoy conocemos, pero advirtió que uno de los peores escenarios para los estudiantes es que la reforma consagre elementos que hoy no están en la discusión, pues no se resuelven con una glosa presupuestaria.
“Hoy ya no estamos peleando por becas ni por aranceles diferenciados, sino por un derecho que es inapelable y no dejará de existir, es un primer paso y nosotros lo valoramos como lo que es. ¿La glosa es un avance respecto a lo que nosotros conocemos hasta el día de hoy? Sí. ¿Es el avance que nosotros queremos y esperamos? No. Por lo tanto aquí estamos en una especie de tránsito hacia el objetivo final que es la transformación completa de la educación, no solo la educación superior”.
En tanto, Carolina Figueroa, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Diego Portales, se refirió a los resquemores del movimiento estudiantil en relación al prematuro ingreso, programado para la próxima semana, del proyecto que establece un marco regulatorio para el sistema de educación superior.
“No tenemos ni una presentación del proyecto, ni siquiera las síntesis de las mesas pre legislativas que se habían prometido. En ese sentido, nosotros estamos por el aplazamiento del ingreso del proyecto, porque es imposible legitimar una reforma que está dejando afuera a la sociedad. Entonces nosotros no vamos a ser parte de un proyecto que no considera a los actores sociales”.
El rector de la Universidad de Chile y presidente del Consorcio de Universidades del Estado (CUECh), Ennio Vivaldi, valoró el rol que jugaron los estudiantes en la defensa de las universidades del Estado, indicando que como pocas veces, durante la discusión se pudo ver a los distintos actores sociales de la educación dando declaraciones conjuntas, intercambiando y compartiendo posiciones.
Además, para el rector Ennio Vivaldi es una buena noticia que se haya retomado en Chile la discusión sobre el sistema de educación superior que el país necesita y el hecho de que quedara socialmente establecido el derecho de las universidades estatales a recibir un trato preferente desde su dueño, algo que en su concepto resultaba incomprensible para cualquiera que no estuviera familiarizado con el sistema educativo chileno.