Tensiones, críticas cruzadas, desacuerdos, advertencias e incluso amenazas. Un panorama que inquieta a muchos en la Nueva Mayoría, tanto en el Gobierno como entre los partidos que la integran.
Más aún cuando continúan repitiéndose diversos episodios en los que los cuestionamientos y acusaciones enfrentan a ministros y parlamentarios de la coalición gobernante. También a asesores y dirigentes de los partidos oficialistas.
No es extraño, entonces, que ya no baste solo con los habituales comités políticos que se celebran cada lunes en La Moneda. Las urgencias son varias, así como la necesidad de generar acuerdos internos. Y eso, la Presidenta Michelle Bachelet lo sabe muy bien.
Por ello, lo que ocurra este miércoles a partir de las 20:00 horas en el Palacio Cerro Castillo de Viña del Mar mantendrá la atención de muchos, incluyendo a los partidos de la oposición.
Desde Chile Vamos, de hecho, realizaron un llamado a la Mandataria para que asuma la responsabilidad de conducir al país en orden, además de que termine con lo que consideran su ingobernabilidad.
Urgencias y prioridades
En principio, la convocatoria de Michelle Bachelet busca analizar la agenda legislativa para este año, con especial énfasis en siete proyectos que el Gobierno espera que sean despachados del Congreso a más tardar el 31 de enero.
Se trata de las iniciativas de ley sobre fortalecimiento y transparencia de la democracia, la que fortalece el carácter público y democrático de los partidos políticos, la que regula la libre competencia, la que simplifica el sistema tributario, la Agenda Corta Antidelincuencia, el proyecto de Carrera Docente y la compleja Reforma Laboral.
Un plazo autoimpuesto que, por cierto, ya comienza a incomodar en la Nueva Mayoría, tanto en el Gobierno como entre los parlamentarios.
De hecho, no son pocos los que califican como un error la idea de apurar los proyectos legislativos a través de las urgencias.
En el encuentro, la Mandataria estará acompañada de sus ministros del comité político, de los presidentes de los partidos de la Nueva Mayoría, los jefes de bancadas de la Cámara de Diputados y el Senado, además de los presidentes de ambas instancias.
Pero no solo se trata de trabajar en el ámbito legislativo. El objetivo también apunta a calmar las aguas dentro de la coalición gobernante, que tan agitadas han estado en los últimos meses.
Reforzar la coordinación y potenciar el cumplimiento de los compromisos, anticipa el vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, destacando el interés de la Presidenta por escuchar las diversas opiniones.
En ese sentido, la propia Michelle Bachelet confirmó la presencia en Cerro Castillo de su equipo de asesores, encabezado por la jefa de gabinete, Ana Lya Uriarte. El tan criticado y, por ahora, intocable “segundo piso”.
Poderes, influencias y conflictos
Y si de injerencias se trata, ¿qué tanta participación tendrá la poderosa dupla Hacienda-Segpres? ¿Cuánta influencia ejercerán los ministros Rodrigo Valdés y Nicolás Eyzaguirre para establecer un cambio de rumbo o para disciplinar a los partidos del conglomerado gobernante?
Por lo pronto, las advertencias sobre nuevas restricciones económicas, producto de la baja en el precio del cobre, ya fueron anunciadas el lunes por el ministro de Hacienda.
En contrapartida, la debilitada figura del ministro del Interior, Jorge Burgos, a quien incluso la Presidenta rechazó su renuncia, luego de que fuera marginado del cuestionado viaje a La Araucanía a fines de diciembre.
¿Algunos temas que debieran tratarse durante el encuentro? El casi seguro aplazamiento de la discusión del proyecto de Reforma Laboral, con el objetivo de evitar su paso a una comisión mixta.
De hecho, el vocero Marcelo Díaz ya anticipó que la prioridad es conseguir “una buena ley”, por lo que no descartan tomarse más tiempo para ello.
También la conflictiva situación que afecta al administrador de La Moneda, Cristian Riquelme, vinculado a los casos SQM y Caval, sin duda que será tema de debate. Conflicto que inevitablemente ha repercutido en la baja popularidad y credibilidad de Michelle Bachelet.
Esto, considerando que mientras desde los partidos exigen su destitución, desde el Ejecutivo parecieran no estar muy interesados en remover al integrante de la G90 del PPD.
¿Otros temas político-judiciales? La pronta formalización de la nuera de Michelle Bachelet, Natalia Compagnon, por delitos tributarios en el marco del Caso Caval, audiencia fijada para el próximo 29 de enero.
Además, como parte del Caso SQM, la solicitud de la Fiscalía de Valparaíso de una audiencia para formalizar a uno de los tantos referentes de la antigua Concertación: Carlos Ominami, quien junto al ex tesorero del Partido Socialista Milton Lee, también serán formalizados, en los próximos días, por delitos tributarios.
Y, por supuesto, el disputado y conflictivo escenario de pactos y listas electorales entre los siete partidos de la Nueva Mayoría, a propósito de las próximas municipales de este año.
Complejo panorama que la Mandataria se propone resolver. Al menos, en lo inmediato, intentando alinear a su sector, aunque con dos inciertos años de Gobierno por delante.