El paso de un sistema electoral binominal a uno proporcional, la fragmentación de la centro-izquierda y la irrupción del Frente Amplio alertó a un grupo de senadores, tanto de oposición como oficialistas, respecto de  las dificultades que tendría el próximo Presidente de la República para gobernar, teniendo eventualmente minoría en el Parlamento.

Un nuevo escenario político que se suma al debate que desde hace varios años vienen protagonizando diversos analistas e intelectuales quienes plantean transitar a un régimen político semi presidencial, cuya principal característica es la separación entre el Presidente de la República como Jefe de Estado y el Primer Ministro como jefe de Gobierno, quien a su vez requiere del respaldo de la mayoría parlamentaria.

En ese contexto, este jueves los senadores, Andrés Zaldívar (DC), Carlos Montes (PS), Felipe Harboe (PPD), Andrés Allamand (RN) y Hernán Larraín (UDI) presentaron un proyecto de reforma constitucional que busca aproximarse en algunos aspectos a este sistema político, aunque sin modificar el régimen actual.

Así lo explicó el titular de la Cámara Alta, Andrés Zaldívar quien apuntó a la necesidad de facilitar la gobernabilidad a través de  instrumentos institucionales, como otorgar mayores facultades al ministro del Interior para que ejerza como jefe político del gabinete.

“Se trata de una facultad del Presidente de la República, no una obligación para designar al ministro del Interior como jefe de gabinete con facultad de convocar al grupo de ministros (…) hay casi una especie de cierta delegación del Presidente de la República en este ministro”, explicó Zaldívar.

En tanto, el senador de Renovación Nacional Andrés Allamand, recalcó que el proyecto no pretende reemplazar el actual sistema político, sino que mejorar la gestión gubernamental a través de una mayor coordinación con el Poder Legislativo.

“Que entre ambos exista una adecuada coordinación, yo diría que ese es el objetivo central de esta propuesta. Aquí no estamos reemplazando el actual régimen presidencial por un régimen presidencial o parlamentario, al revés, le estamos abriendo al futuro presidente, cualquiera que este sea, una alternativa para poder tener mayor flexibilidad en su gestión”, precisó Allamand.

Mientras, el abogado constitucionalista Javier Cousso es partidario de incluir este tipo de reformas en un marco general de modificaciones que requiere el sistema político.

“Yo soy partidario de una nueva Constitución porque justamente nos permitiría discutir con calma este tipo de reformas. Esto es una forma de acometer casi como parchando el actual sistema constitucional chileno y creo que sería mucho más lógico que el país se planteara la reforma a su sistema político, que está siempre regulado por la Constitución, dentro de una discusión más general sobre una nueva Constitución”, subrayó el especialista.

Cabe recordar que los resultados de la etapa participativa del proceso constituyente en materia de institucionalidad, entre otras cosas, plantearon la necesidad de avanzar hacia un sistema semipresidencial, para  equilibrar los poderes del Estado.

Estas modificaciones estarían incluidas en el proyecto de reforma constitucional que enviará al Parlamento durante los próximos meses la Presidenta Michelle Bachelet.