Con la cuenta pública como telón de fondo, el alcalde de Valparaíso, Jorge Sharp, conversó con Radio y Diario Universidad de Chile, momento en el cual se refirió a las urgencias que tiene la ciudad puerto, por ejemplo, la dictación de una “Ley Valparaíso”, es decir que parte de las ganancias que genera la actividad portuaria quede en la capital regional.
“Estamos hablando, por tanto, de que el Estado pueda responder con claridad frente a la situación de abandono a la que ha sido objeto Valparaíso por más de 25 años. Valparaíso es la ciudad patrimonio de la humanidad, es rostro en el mundo de Chile, los extranjeros, los estudiantes universitarios de afuera vienen a Chile por Valparaíso, entonces la deuda ha sido muy grande con esta ciudad y nosotros confiamos de que desde esta oportunidad que se nos da para visibilizar esta necesidad de la ciudad, se puede instalar un debate”.
En este sentido, Sharp sostuvo que estas necesidades que presenta Valparaíso son parte del debate más general sobre la descentralización y la correspondiente autonomía para administrar los recursos propios de la región, tema que, según el alcalde de Valparaíso, se viene planteando hace muchos años en Chile.
El edil hizo énfasis en que un eventual incremento en los recursos disponibles para la Municipalidad puede ir en directo beneficio de los vecinos de los cerros de la ciudad puerto que viven en precarias condiciones y que son los mismos que ven sus casas y viviendas quemarse cuando se desata un megaincendio.
“No queremos pedirle todo al Estado, no queremos llorar por el apoyo del Estado, queremos que el Estado, en definitiva, nos dé las condiciones para que esta ciudad pueda avanzar hacia el desarrollo y el progreso, garantizar calidad de vida para los próximos 20 años, a todos los porteños sin distinción”.
Jorge Sharp aseguró que actualmente, Valparaíso está viviendo un momento clave en la historia de la ciudad y esto tiene que ver con las decisiones que se tomen ahora pensando en la proyección y planificación urbana a 20 o 30 años del puerto, y ellas afectarán tanto al borde costero como a los cerros, en donde la industria inmobiliaria ha crecido de forma desregulada y afectando a los habitantes de la ciudad.
Es por ello que se hace necesario un nuevo plan regulador, sin embargo, esto no va a poder ser posible en el mediano plazo, pero lo que sí se puede hacer es modificar el actual instrumento apuntando a limitar las construcciones en altura en los cerros, a un máximo de cuatro pisos. “No queremos que los cerros se llenen de torres”, aseguró Sharp.
“La Unesco declara sitio de patrimonio de la humanidad a Valparaíso, no solamente por sus grandes obras e infraestructura, sino que también por la forma en que los porteños hemos vivido y hemos construido nuestra ciudad, y eso se refleja en la forma en que los porteños han construido en los cerros, que no se consagre ningún tipo de norma, el derecho a la vista, el respeto que cada porteños y porteña tiene por el otro al momento de construir su casa. Todos sabemos que no podemos construir la casa más alto que el que está arriba nuestro porque si no se tapa la vista y el derecho que tenemos de vivir en un lugar tan hermoso como esto”.
El alcalde de Valparaíso señaló, a pesar de estos cuestionamientos, que el puerto necesita al actor privado, que en ningún caso se trata de prescindir de ellos, “pero que sus intereses dialoguen con los intereses generales de la comunidad”, enfatizó.
Finalmente, Jorge Sharp se refirió a la situación del borde costero en el sector del muelle Barón, lugar en el cual aspiran instalar “un gran parque público” que permita el acceso a la ciudadanía al mar y no que sea apropiado por intereses privados como es el caso del proyectado Mall Barón.