Cuando aún no iniciaba Sebastián Piñera su nuevo mandato en La Moneda, ya se desvinculaba al subsecretario de Redes Asistenciales sin siquiera haber asumido. Días después ocurrió un segundo incidente al interior de Chile Vamos por los cuoteos de los cargos públicos de primera línea, dando luces de que la relación interna en el conglomerado oficialista no había comenzado en los mejores términos.
Si anteriormente sucedió con la designación de intendentes, el nombramiento de los gobernadores a lo largo del país también fue motivo de conflicto dentro del conglomerado de derecha. En este caso fue en la Gobernación de la Provincia de Bío Bío. En dicha zona, hasta hace unos días, el designado era Cristián Fuentes, actual presidente del PRI en la zona, pero el sábado el escenario cambió y a eso de las 21 horas se comunicó públicamente que el gobierno cambiaba el nombre por Teresa Browne, hermana del ex diputado Pedro Browne, quien es cercana a las filas de Renovación Nacional.
¿Qué hizo caer a Fuentes? Veamos el contexto. El futuro gobernador es presidente regional del PRI. Dicho movimiento dejará de ser partido político legal por no alcanzar los requisitos del Servel en las pasadas elecciones parlamentarias y a nivel de nombramientos tan sólo tenía dos gobernaciones. ¿Por qué entonces quitarle lo poco a la colectividad que menos recibió de parte de Piñera? Considerando además que la otra gobernación que les destinaron es en el extremo frío de la Antártica.
Según distintos testimonios, todo apunta a una operación entre RN y la UDI, específicamente a Jacqueline Van Rysselberghe, presidenta gremialista.
A Fuentes se le acusaba de haber apoyado activamente la candidatura de Alejandro Guillier durante la segunda vuelta presidencial. Al menos así lo aseguraban distintos militantes de Renovación Nacional y la UDI en la comuna de Los Ángeles.
Pero esta hipótesis resulta extraña al momento de revisar las redes sociales de Fuentes. En su timeline son constantes las publicaciones de propaganda en favor de Sebastián Piñera. Incluso el 3 de diciembre en diversos medios de la Región del Bío Bío, Fuentes figura en compañía de la presidenta del PRI, Alejandra Bravo, llamando al Frente Amplio a que vote por el ahora presidente. Incluso el casi gobernador grabó un vídeo de su hija de dos años llamando a votar por el mandatario.
De todas formas, desde La Moneda decidieron sacarlo y el PRI no recibió siquiera un llamado telefónico de parte de los que están en el Ejecutivo.
En los días en que todo era especulación, operadores de la política en el Bío Bío señalaban a nuestro medio que Fuentes “estaba pedido”, que tan sólo faltaba alguna aparición importante en los medios para que su nombramiento se cayera. Asimismo altas fuentes de la UDI nos indicaban que el presidente ya había decidido el cambio de gobernador. Por su parte, cuando consultábamos al secretario general del PRI, Eduardo Salas, este aseguraba que eran mentiras y que Fuentes seguía.
Y tal como vaticinaban los operadores, el sábado pasado se publicó la “aparición importante”. En el diario El Sur de Concepción la senadora y presidenta de la UDI, Jaqueline Van Rysselberghe, concedió una entrevista en la que señalaba el nombramiento de Fuentes como un “error”. La congresista señalaba que “es difícil pensar que alguien que trabajó con los candidatos del PPD, que hizo propaganda por Guillier, tenga un compromiso afectivo con este proyecto político”. Horas más tarde se confirmó la modificación.
Días antes la senadora ya daba luces de su molestia por la situación de los gobernadores. Fue contactada por nuestro medio para consultarle su opinión sobre Fuentes, pero acotó con un “No me voy a referir a ese tema”, en un tono de desagrado.
Resulta que si bien Cristián Fuentes es dirigente del PRI y ha sido fundamental en la existencia del movimiento en el Bío Bío, en la zona es reconocido como un histórico cercano a la UDI. Fue militante y renunció por diferencias con representantes en Los Ángeles e incluso compitió como independiente en la lista del gremialismo por el Consejo Regional del Bío Bío, además dicho cargo lo venía ejerciendo desde 2016, cuando asumió en reemplazo del militante de la UDI, Jaime Vásquez, gran amigo suyo.
Pero pese a su identificación gremialista, Fuentes es mucho más cercano en dicho partido al diputado Iván Norambuena que a Van Rysselberghe, incluso durante su candidatura a Core trabajaron de cerca.
Norambuena y Van Rysselberghe nunca han sido cercanos. Pero además existe un potencial conflicto al que distintas fuentes de Chile Vamos en el Bío Bío describen como el motivo real de la caída del nombramiento del gobernador.
Iván Norambuena tendría un alto interés de entrar por la pelea senatorial en 2021. A diferencia de 2013, cuando existían dos circunscripciones (Bío Bío Costa y Bío Bío Cordillera), esta vez la región estará representada sólo por una. Las fuentes de la coalición derechista señalan que Norambuena siempre tuvo ganas de subir de nivel político, pero que en la práctica era difícil, puesto que competía en los territorios con Víctor Pérez. Pero, en este nuevo orden, su contrincante sería la presidenta del partido con tres provincias a conquistar: la de Arauco (por la que Norambuena es diputado), Concepción (donde Van Rysselberghe es senadora) y Bío Bío, donde la participación de Cristián Fuentes habría favorecido mucho más al diputado.
Los contactos consultados señalaron a nuestro medio que en esto la presidenta de la UDI tuvo el respaldo del senador Víctor Pérez, quien tiene un fuerte arraigo en la Provincia de Bío Bío. Asimismo, la directiva regional de Renovación Nacional habría permitido esto. Según personas cercanas a Cristián Fuentes, el presidente de RN en el Bío Bío, Claudio Eguiluz, se contactó con el casi gobernador para tranquilizarlo, señalando que debían sacarlo pero que ahora sólo debían ver donde reubicarlo.
En el Chile Vamos del Bío Bío algunos aseguran que Van Rysselberghe será protagonista a nivel regional y nacional por este tipo de situaciones, enmarcadas en su estilo imponente en política.