Hasta el Palacio de La Moneda llegó el presidente de la Corte Suprema, Haroldo Brito, para reunirse con el presidente de la República, Sebastián Piñera, en una cita que fue solicitada por el pleno del máximo tribunal para dar a conocer la “incomodidad” que sienten los ministros respecto de la Acusación Constitucional presentada en contra de tres de sus integrantes.
Así lo indicó el presidente de la Suprema, Haroldo Brito, quien señaló que “hemos venido a hacer presente al jefe de Estado la preocupación de la Corte Suprema por una actuación de naturaleza jurisdiccional que nosotros entendemos al margen de este mecanismo de control parlamentario”.
Asimismo, Brito agregó que sus argumentos fueron escuchados “con mucha atención” por parte del Mandatario quien habría pedido mayores detalles, y agregó que “nos preocupa la garantía de la autonomía en relación de los ciudadanos, de las personas, eso lo conversamos detenidamente”.
Haroldo Brito descartó, además, que en esta cita existiera detrás un ánimo de amedrentar a los parlamentarios que impulsaron la acusación constitucional.
“El presidente lo que ha hecho es escucharnos con muchísima atención y, ciertamente, estamos conscientes de que se están haciendo las acciones encaminadas a generar buena convicción para alcanzar prontamente una conclusión. Los jueces no tenemos la intención de amedrentar ni tenemos la capacidad de amedrentar”.
Distinta opinión tiene el diputado del Partido Socialista, Jaime Naranjo, quien calificó la cita de “extrema gravedad”.
“Me parece de la mayor gravedad, me parece que esto forma parte de una campaña de amedrentamiento, esto es intolerable, es inaceptable, esto no lo había visto nunca desde que volvimos en democracia, que el Presidente de la República se preste para poner en entredicho una facultad que es propia del poder legislativo”.
Por su parte, el ministro de Justicia, Hernán Larraín, criticó nuevamente la acción emprendida por los parlamentarios.
“No estamos blindando a nadie. Tenemos que velar por el Estado de Derecho. Cuando se cuestiona por un poder -en este caso un grupo de diputados- los fundamentos de un fallo, se está yendo más allá de lo que es propio del Estado de Derecho, por eso estamos llamando a la reflexión, a la prudencia, para que el ejercicio de las facultades privativas de los diputados, no se excedan generando conflictos institucionales que el país no necesita”.
En la reunión, también se abordaron otros temas ligados a la acusación, como un cambio a la ley sobre las libertades condicionales. “Fuimos informados de eso y también desde luego se nos informó acerca de otros proyectos de interés para el sistema de justicia, lo que ciertamente escuchamos con bastante interés”, sentenció Brito.