El homenaje Miguel Krassnoff que se hiciera el sábado 6 de octubre en la Escuela Militar ha dejado coletazos que han salpicado tanto al Gobierno, como al Ejército y a activistas de derechos humanos.
Recordemos que el Ejército llamó a retiro al director de la Escuela Germán Villarroel y al hijo del criminal de la dictadura, Miguel Krassnoff Bassa, aunque manteniendo sus grados de coroneles, con los beneficios que ello conlleva.
Al respecto, el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, Carlos Margotta, consideró que la postura del Gobierno respecto de un “nunca más” debe verse reflejada también en los actos.
“A nosotros nos parece que el nunca más, proclamado por un ex comandante en jefe del Ejército, se pone en cuestionamiento hoy en día, porque estos actos dan cuenta que hay un discurso, pero hay un hacer, un quehacer que no se corresponden con esos propósitos”.
En tanto la presidenta de la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos, Alicia Lira, sostuvo que la doctrina al interior de las Fuerzas Armadas debe ser modificada.
“Nosotros estamos pidiendo sanciones y castigos reales a militares que viven del sueldo del pueblo chileno, el mismo que exterminaron por años. Estos militares deben ser expulsados inmediatamente por apología al terrorismo de Estado, pues son pésimos precedentes para las juventudes que estudian la carrera militar”.
Lorena Pizarro, presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, espera que el presidente Sebastián Piñera se pronuncie respecto de estos hechos.
“Quiero emplazar al presidente de la República a que dé una explicación al país de lo ocurrido, y que fije una posición como Estado frente a esta afrenta que se cometió no solo a los familiares, sino que el país. También cabe señalar que nos parece débil que solamente se llame a retiro a dos coroneles que hicieron apología del terrorismo al interior de la institución castrense”.
Si bien el mandatario no se ha referido a la situación, sí lo hicieron algunos personeros del Gobierno.
El ministro del interior, Andrés Chadwick, respaldó la medida adoptada por la institución uniformada, indicando que “compartimos la decisión que ha tomado el Ejército, en cuanto que ha visto en esta situación, una actitud que va en contra de la doctrina fundamental del Ejército”.
El secretario de Estado, afirmó que en recintos públicos no se pueden hacer homenajes a personas condenadas por la justicia.
“En orden a que, en estos recintos, que son recintos del Estado, no se pueden hacer actividades con respecto a personas que están hoy día con una condena judicial”, sostuvo.
Por su parte, el ministro de Defensa, Alberto Espina declaró que “no es correcto que en un recinto de las Fuerzas Armadas destaquen a un ex oficial que está condenado por delitos gravísimos”.
En ese sentido, Espina dijo que las Fuerzas Armadas y el Ejército de Chile tienen el mayor de los respetos por los derechos humanos, sobre todo sus soldados jóvenes, quienes –según el secretario de Estado- quieren unir y no dividir.
Los ex uniformados que fueron dados de baja son quien fuera director de la Escuela Militar, Germán Villarroel, y el hijo de Miguel Krassnoff, Miguel Krassnoff Bassa.
La decisión fue adoptada este lunes, debido a sus “faltas a la disciplina que derivaron en un gravísimo daño provocado a la institución”.