A tres años de que se inaugurara la primera farmacia popular en la comuna de Recoleta, el Gobierno anunció una rebaja en el presupuesto de la Central de Abastecimiento del Sistema Nacional de Servicios de Salud (Cenabast).
La disminución presupuestaria podría impactar directamente en el modelo de las Farmacias populares, ya que Cenabast es su principal proveedor, por lo mismo, es que Daniel Jadue, Alcalde de Recoleta, planteó su sospecha de que “el Estado ha optado por matar, sin decirlo, a las farmacias populares, debilitando su principal abastecedor que es la Cenabast”.
Es por esto que el alcalde propuso “convertir a Cenabast en una empresa estatal, darle atribuciones para que sea comprador único y que pueda venderles a los privados con bandas de precio y fijación de precio, de tal manera de bajar los precios de los medicamentos. Esto no es un delirio de los comunistas, esto se hace en partes del mundo y en países absolutamente capitalistas, los medicamentos están con precios fijos, y el rol del Estado es absolutamente mayor al que este Gobierno se imagina para el Estado chileno”.
En el mismo sentido, Jadue criticó el doble estándar del Presidente de la República, ya que en el discurso del 21 de mayo pasado anunció un reajuste en la central de abastecimiento y, por el contrario a lo prometido, en la presentación del presupuesto anual propuso una rebaja de cerca de 77 millones pesos.
El alcalde de Recoleta comparó la rebaja presupuestaria que el Gobierno pretende hacer a la Cenabast con lo ocurrido con la educación en la dictadura: “se dejó de invertir en educación para matar a la educación pública, lo mismo se quiere hacer con las farmacias populares”.
Por su parte, Daniel Moraga, Secretario Ejecutivo de la Asociación Chilena de Municipios con Farmacia Popular (Achifarp), explicó que esta rebaja presupuestaria podría afectar a las farmacias populares, ya que “Cenabast tiene un nivel de falla respecto de la provisión anual de medicamentos que solicitan las farmacias comunales de alrededor de cincuenta por ciento. Me imagino que eso, con menos presupuesto, irá en aumento. Por otra parte, me preocupa la distribución y trasporte de los medicamentos, ya que, si no hay presupuesto para invertir en medicamentos y personal, difícilmente habrá para trasporte”.
Frente a la rebaja presupuestaria, Daniel Moraga advirtió que “la falta en la provisión de medicamento obliga a las farmacias populares a negociar con los laboratorios por algunos medicamentos en específicos y eso genera que no se puedan conseguir valores convenientes para los vecinos, como sí sucede cuando se opera a través de Cenabast”.
Las farmacias populares han generado una diferencia de precio para sus clientes que ha permitido, incluso, que personas que antes no podían seguir su tratamiento, ahora si lo puedan hacer. Sin embargo, esta situación no ha sido agradable para la industria farmacéutica, lo que ha generado el desprecio a las farmacias populares por parte de los productores de medicamentos.
“Nosotros hemos solicitado reuniones con las distintas asociaciones que existen de los productores locales de fármacos u otros laboratorios grandes que están agrupados en otra administración y no nos ha ido bien, no nos han recibido, no tenemos respuesta, y cuando hemos tratado de conversar con laboratorios por separados, la verdad es que no acceden a trabajar en una política de precios más justa, sin embargo después salen echándole las culpa a la farmacias de los precios y ellos no se allanan a trabajar con nosotros de una manera fluida”, denunció Daniel Moraga.
La acción de rechazo de los laboratorios dice relación con que las grandes cadenas farmacéuticas son las que compran el mayor volumen a esta industria, por lo mismo, es que según el representante de la Asociación Chilena de Municipios con Farmacias Populares no se puede permitir que la Cenabast disminuya su presupuesto, porque si no, la única alternativa sería importar los insumos desde otros países.
La evaluación que hace Daniel Morga respecto a los tres primeros años de las farmacias populares es positivo, “por el nivel de ahorro que le han generado a las personas, la posibilidad de que la gente de menos recursos puedan terminar sus tratamientos y cómo se ha trasformado en un impacto positivo en los municipios, ya que antes se entregaban subvenciones anuales por trecientos millones de pesos a los vecinos para que fueran a comprar a las farmacias de cadena y hoy, el funcionamiento de las farmacias populares, más algunas subvenciones urgentes, suman un costo que no supera los cien millones de pesos, esto ha redundado en un ahorro para los municipios y una mejor gestión de los recursos”.
Por su parte, la bancada del PC-PRO ha declarado que va a rechazar el presupuesto en esta partida. Por lo mismo, hizo un llamado al Gobierno a ser consistente con lo que proponía el Presidente en el discurso del 21 de mayo y a no dejarse doblar la mano con los intereses de los grandes empresarios que están involucrados en el negocio de la salud.