Los representantes de los 20 países más acaudalados del mundo manifestaron sus diferencias sobre comercio y medioambiente, durante la cumbre que mantuvieron hasta este sábado en Argentina.
“Es el comunicado final más débil jamás visto en un G20″, declaró a la AFP Thomas Bernes, experto del Centro Internacional de Gobierno e Innovación y ex negociador canadiense en este grupo, cuya primera cumbre se celebró hace diez años, en plena crisis financiera.
El cambio climático fue el más pequeño denominador común. Esto plantea la cuestión de la credibilidad del G20 sobre el comercio, pero también sobre el clima, las migraciones y el FMI”, (el texto de Buenos Aires) “no permitiría resolver ninguno de los problemas más importantes.
Concretamente, los miembros del G20 “signatarios del acuerdo de París” sobre el clima -es decir todos menos Estados Unidos- subrayan que este último es “irreversible” y se “comprometen a su plena implementación”. Toman en cuenta, no obstante, “las diversas situaciones nacionales”.
Entre los puntos clave del documento se encuentran lograr “un crecimiento fuerte, sostenible, balanceado e inclusivo”. Para ello, destacaron la importancia del diálogo y la flexibilidad a la hora de negociar entre las naciones.
Los líderes de estos países indicaron que adoptarán “tecnologías transformadoras” con el fin de crear nuevas oportunidades económicas y mejores trabajos y condiciones de vida e hicieron énfasis en los desafíos que enfrentarán los individuos, las empresas y los gobiernos.
Acordaron también tomar acciones puntuales para acabar con el trabajo forzado, el trabajo infantil, el tráfico de personas y la esclavitud moderna. De igual forma, recalcaron la importancia del acceso a la educación como derecho humano y como estrategia fundamental de desarrollo para crear sociedades “más inclusivas, prósperas y pacíficas”. También afirmaron que promoverán, de forma coordinada, políticas de empleo y educación de calidad.
Otro de los pilares que resaltaron fue la equidad de género. Los países continuarán trabajando para reducir la brecha de género en la fuerza laboral a 25 por ciento en 2025 y pactaron promover iniciativas con el fin de acabar con todas las formas de discriminación hacia las niñas y las mujeres.
Los presidentes presentes en el G20 indicaron que continuarán discutiendo medidas para enfrentar las crisis migratorias que vive el mundo. Los grandes movimientos de refugiados son una preocupación global con consecuencias humanitarias, sociales, políticas y económicas.