Si hay algo en lo que todos coinciden por estas horas en la oposición es que las confianzas quedaron dañadas con la Democracia Cristiana, luego de que la bancada de este partido decidiera romper con el acuerdo del sector y aprobar la idea de legislar la cuestionada Reforma Tributaria de Sebastián Piñera.
Si bien, desde la falange se han defendido señalando que en la discusión en particular rechazarán lo medular de la iniciativa –incluyendo la polémica reintegración tributaria- desde el resto de las colectividades opositoras han endurecido el tono en su contra, considerando que en múltiples ocasiones dicho partido ha tomado definiciones que van en la linea contraria del sector.
Es así como algunos legisladores del Frente Amplio, particularmente del Partido Humanista, han planteado la posibilidad de establecer una censura a la presidencia de la Cámara al DC Iván Flores, a raíz del notorio incumplimiento de los acuerdos que lo llevaron a la testera de la Corporación.
Mientras, otros son más cautos y apuntan a que quienes rompieron la unidad de la centro- izquierda sean los que den las explicaciones y paguen los costos que corresponda.
En esa línea, consultado por nuestro medio, el jefe de bancada de Revolución Democrática, Pablo Vidal afirmó que, “nosotros hemos respetado todos los acuerdos y compromisos que hemos suscrito y seguiremos haciéndolo. Quienes han roto los acuerdos deben dar explicaciones”.
Por su parte, desde el Partido Socialista junto con expresar su sorpresa con la actitud adoptada por la bancada, recalcaron que luego de la votación de este miércoles, las confianzas quedaron lesionadas.
“Este episodio daña las confianzas que se deben generar en las fuerzas progresistas y constituye un claro traspié ante el desafío de la unidad. Esperamos que prime un sentido de responsabilidad y que, al momento de tramitar este proyecto en particular, todos aquellos artículos que perjudican a la clase media y que benefician al uno por ciento de los chilenos más ricos, sean finalmente rechazados”, sentenció el senador y presidente del partido, Álvaro Elizalde.
En tanto, el vicepresidente de la colectividad, Camilo Escalona, hizo hincapié en los costos políticos para una oposición que pretende derrotar electoralmente a la derecha en los próximos comicios.
“No es la situación que esperábamos, no contribuye al entendimiento de las fuerzas de oposición y naturalmente retarda los esfuerzos que hemos venido haciendo para generar las condiciones de una alternativa que sea capaz de enfrentar a la derecha”.
Para la diputada del Partido Comunista, Karol Cariola, “hay cuestiones que se hacen insostenibles, que tienen que ver con las confianzas políticas que aquí no se han logrado sostener de la manera que corresponde”. En conversación con 24 Horas la parlamentaria lamentó que se haya “traicionado una confianza a pesar de la actitud que habían tenido durante el año anterior, en donde dos o tres votos se daban vuelta”.
Mientras, consultada por Diario y Radio Universidad de Chile, la jefa de bancada del PPD, Andrea Parra, señaló que su partido “no está en la lógica de cobrar boletas. Los partidos toman sus decisiones en plena libertad, distinto es que aboguemos por tener una oposición que actúe unida y en un marco de confianzas mutuas.
Y agregó que, “decir que aquí no ha pasado nada sería engañarnos, de hecho, diputados y senadores han sido muy críticos con su propio partido. Como bancada siempre estaremos por construir acuerdos más que por alimentar conflictos”.