La comisión de Trabajo de la Cámara aprobó en particular el proyecto de reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales. Con ello, la moción de las diputadas comunistas Karol Cariola y Camila Vallejo será revisada por la Sala de la Corporación.

Este lunes, la instancia parlamentaria ya había aprobado los dos artículos centrales de la propuesta, mientras que durante esta mañana se dio luz verde a un artículo transitorio por siete votos a favor y seis en contra.

⭕️ AHORA | Comisión de Trabajo concluye votación de proyecto que rebaja la jornada laboral a #40horas y lo despacha a la Sala.

— CámaraDiputadosChile (@CamaraDiputados) September 3, 2019

Luego de la votación, el ministro del Trabajo, Nicolás Monckeberg lamentó el despacho del proyecto, reiterando que éste “va a afectar el empleo y las remuneraciones de muchos trabajadores”.

Junto con ello, el secretario de Estado recalcó que “a ningún trabajador se le va a pagar lo mismo por trabajar 45 horas que por trabajar 37 0 35, lo demás es engañar a los trabajadores”.

Y agregó que “yo creo que mi obligación es decir la verdad: nosotros vamos a defender el sueldo de los trabajadores  y no podemos permitir que a través de un proyecto que además es ilegal e inconstitucional, se termine afectando el sueldo de los trabajadores”.

Asimismo, anunció que “vamos a recurrir al Tribunal Constitucional para que sean ellos los que determinen con claridad que ningún presidente de la República, ningún parlamentario con el proyecto que sea, puede arrogarse atribuciones que la Constitución no le da”.

Por su parte el diputado UDI e integrante de la comisión de Trabajo, Patricio Melero aseguró que su sector no permitirá que la iniciativa siga avanzando en su tramitación: “Siento una profunda decepción que una idea compartida que es la de reducir la jornada laboral, haya terminado de tan mala forma, con un proyecto que se aprueba con fórceps, sin los consensos mínimos, sin haberlo estudiado en profundidad, sin haber permitido que la comisión de Hacienda viera un proyecto de ley que irroga gastos y una iniciativa que parte mal del origen, violando sistemáticamente los preceptos constitucionales que en esta materia nos rigen”.

En esa línea, el legislador recalcó que “una reforma que se inicia mal, va a terminar peor. Esta es una reforma que no tiene destino en los términos en que fue aprobada, no tiene ninguna posibilidad de seguir avanzando”.