Aprobar es dignidad: el manifiesto de Nodo XXI para el plebiscito constituyente

La carta está firmada por más de 30 personalidades de la sociedad civil y del mundo académico.

La carta está firmada por más de 30 personalidades de la sociedad civil y del mundo académico.

El 25 de octubre de 2020 se realizará una de las  votaciones más importantes de nuestra historia. Así parte el manifiesto presentado este miércoles por la fundación Nodo XXI, que recalca que por primera vez las y los chilenos podrán “escribir una nueva Constitución a través de una Convención Constitucional que defina el Chile que queremos”.

La carta, que ya viene siendo firmada por más de 30 personalidades de la sociedad civil y del mundo académico, reconoce al plebiscito del 25 de octubre como el resultado de la movilización del pueblo de Chile “que se volcó a las calles para reclamar contra los abusos del sistema neoliberal que durante décadas ha privatizado los derechos y anhelos de amplios sectores de la ciudadanía, condenándonos al endeudamiento, a la precariedad o a la marginalidad y profundizando las desigualdades en el país”.

Asimismo, recuerda que la palabra “Dignidad” fue la que quizás se repitió con más intensidad en los meses de protesta, esto al alero de las violaciones a los DDHH, de las más de 400 personas que sufrieron traumas oculares, de las torturas, los abusos y la prisión en contra de miles de manifestantes. “La dignidad se organizó en movilización, cabildos, asambleas territoriales, y luego en ollas comunes y redes sociales, retomando la voluntad popular”, resaltan.

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Como antecedentes a las manifestaciones de octubre de 2019, el manifiesto menciona a las huelgas del gas en Magallanes el 2011, a las protestas en Freirina y Aysén el 2012; a la rebelión chilota del 2016, a las masivas movilizaciones contras las AFP, a las luchas de las y los trabajadores subcontratistas y a honorarios, a NiUnaMenos  y al mayo feminista del 2018, entre otras; las cuales conforman motivos suficientes para despejar la consigna de que el estallido tomó por sorpresa a la clase política del país.

Ya respecto del plebiscito constituyente y a pocos meses de la votación, el manifiesto pone énfasis en que más que el triunfo del apruebo, es importante que éste se dé con un alto porcentaje. “Debemos derrotar la abstención. Solo así las transformaciones que anhelamos tendrán fuerza, legitimidad y alteraremos los estrechos márgenes de la política que se han reproducido elección tras elección”, aseguran.

Así también proyectan que tanto el plebiscito como el proceso constituyente todavía están abiertos, y que cuán democrático, participativo y transformador sean estos procesos dependerá “de que la ciudadanía que quiere cambios participe activamente de él. El acuerdo inicial no incluía paridad de género. Ese fue un triunfo del movimiento feminista que presionó para lograr el hito histórico de una constituyente paritaria. Ahora es necesario lograr cupos reservados para los pueblos originarios, potenciar y asegurar la participación  de independientes, y garantizar que las demandas de estos sectores y los acuerdos de cabildos y asambleas territoriales sean parte del debate del órgano constituyente”.

Finalmente, la carta interpela al Gobierno respecto de tomar todas las medidas necesarias para facilitar una alta participación ciudadana, intergeneracional y sin segregaciones. Según mencionan, es necesario asegurar las condiciones óptimas para votar con tranquilidad y seguridad, así como trabajar por constituir redes de cuidado en barrios, familias y organizaciones para que las personas puedan ir a votar.





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