El lunes, el dirigente sindical, Andrés Giordano, y el ahora ex ministro de Hacienda, Ignacio Briones, sostuvieron un breve encuentro en el que cruzaron un par de frases en las cercanías del edificio que alberga al Ministerio. En la oportunidad, Giordano increpó al economista por la extensión a la ley de protección al empleo, sin embargo, no obtuvo una respuesta de parte del entonces secretario de Estado, quien se alejó expresando que no era el momento para tratar tal situación y que él se encontraba en otra cosa.
Luego de ese último encuentro, y consultado respecto de su evaluación de la gestión del renunciado miembro del Gabinete, Giordano, en entrevista con nuestro medio, dio por reprobado al ex Decano de la Escuela de Gobierno de la Universidad Adolfo Ibáñez.
“Para mí el exministro Briones deja un legado muy consecuente con la impronta del Gobierno en Chile. Un gobierno que ha sido incapaz de dialogar con la gente, con las y los trabajadores y con los sindicatos. Nosotros participamos del proceso legislativo relativo el sueldo mínimo, presentamos una propuesta al Ministerio, un año antes de la pandemia, sobre cómo mejorar el salario mínimo, también, cuando se discutió la ley de protección al empleo, entregamos propuestas de alternativas de protección y básicamente solo recibimos portazos en la cara. Tal cual lo hizo el lunes conmigo en la calle, al parecer desde abril no se ha dado nunca el momento para que el Gobierno escuche verdaderamente a la gente y ponga la vida y la dignidad de las personas por sobre el mercado, que es lo que ha primado en todas las decisiones y políticas de manejo de la pandemia”.
Hoy estuve apoyando a l@s compañer@s movilizad@s de la @DirecDelTrabajo por condiciones dignas y me topé con @ignaciobriones_. Le pregunté por la famosa Ley de “Protección” al Empleo que sigue reproduciendo miseria, problemas en los pagos y despidos al largo plazo. Su reacción👇🏽 pic.twitter.com/sghjHeGpkY
— Andrés Giordano (@AndresGiordanoS) January 25, 2021
La mayor crítica del dirigente sindical dice relación con la extensión de la Ley de Protección al Empleo anunciada a inicios de este año por parte del Ejecutivo. Tanto la organización sindical que encabeza, como otros órganos intermedios y organizaciones sociales han rechazado esta medida acusando que en realidad solo ampara a los empleadores a través de una profundización de la precarización de los trabajadores.
“Nosotros como organización desde el inicio de la tramitación de este proyecto nos hemos opuesto al mecanismo de protección del empleo, no porque no creamos que no se deba proteger el empleo, porque es de Perogrullo que debe ser protegido, lo que sí decimos es que esta es una política que no solo precariza las condiciones naturales de trabajadores y trabajadoras porque reciben un porcentaje muy menor al que acostumbran recibir en sus sueldos, sino que además traslada los costos de la crisis a los hombros de quienes menos pueden soportarlo: los trabajadores y trabajadoras del sector de servicios, del comercio o el sector gastronómico que terminan en condiciones muy precarias a quienes tanto las empresas como el Gobierno les meten la mano al bolsillo para este autofinanciamiento y aliviar así la carga de los empleadores. Finalmente, a quienes se protege es a los empleadores”.
Respecto particularmente de la base para realizar el cálculo a partir del sexto giro y hasta el 12, que será sobre la base del 45% del promedio de las últimas remuneraciones del trabajador, con un monto superior de $419.757 y el inferior de $225.000, el dirigente del Sindicato de Starbucks Chile y también candidato independiente a la Convención Constituyente criticó esos montos, especialmente dado el marco económico y sanitario en que se encuentra nuestro país.
“Es absolutamente imposible vivir dignamente con los subsidios que ha entregado la ley de protección del empleo y esto lo digo como un trabajador que lo vivió en carne propia, enfrentando dificultades para costear el arriendo o viendo a compañeros que tenían otros problemas para seguir subsistiendo. Los subsidios son bajísimos, además se siguen ocupando los propios ahorros, es decir, hay un autofinanciamiento, que por lo demás es insuficiente para la vida digna. La extensión que planea el Gobierno no plantea ninguna nueva alternativa para tratar de mejorar estos subsidios y responder por la deuda que ya se generó cuando se acudió a los ahorros de las y los trabajadores sin que, en muchos casos, ellos pudieran negarse. Eso fue lo que pasó en Starbucks, y luego de haberlos demandado y ganado ese juicio, la empresa debió indemnizar a gran parte de las y los trabajadores por una mala aplicación de la ley”.
“Seguir en esta política de sordera hacia las organizaciones sindicales o sociales, me parece absolutamente nefasto y continuar en esto solo agudizará la crisis para las familias chilenas”, agregó.
Giordano también analizó el rol cumplido por la Administradora de Fondos de Cesantía (AFC) entidad encargada de entregar los pagos de los subsidios a los trabajadores cuyas empresas se acogieron a la ley de protección del empleo. Para el dirigente sindical, el organismo es incapaz de hacer frente a las solicitudes de los trabajadores.
“Hay un desprecio tan grande de parte del Gobierno hacia los trabajadores que, a pesar de las críticas y evidente incapacidad de la AFC para tramitar el volumen de subsidios generados a partir de las suspensiones, no ha habido ninguna inversión real respecto de la modernización o de aumento de personal o de tecnología asociada a los pagos. Solo en nuestro sindicato hemos recibido cientos de reclamos por pagos que aún no se realizan desde noviembre, esas son platas que los trabajadores necesitan para vivir y eso redunda en que hay un círculo de dependencia de la deuda o, en muchos casos, derechamente la precarización absoluta de las condiciones de las personas en el marco de la pandemia. La AFC no da abasto y da la sensación de que al Gobierno no le interesa mejorar las condiciones a través de las que los trabajadores reciben sus subsidios hoy en día”.
Este martes asumió en Hacienda el nuevo titular de la cartera, Rodrigo Cerda Norambuena, economista de la Pontificia Universidad Católica, es muy cercano al Presidente Piñera. De hecho, durante la ceremonia de juramento del nuevo secretario de Estado, el mandatario lo calificó como “un hijo pródigo que retorna a su casa para enfrentar una muy exigente carta de navegación para el futuro”.
Sobre esta nueva figura que tendrá a cargo las finanzas públicas en el último tramo de la segunda administración de Chile Vamos, Andrés Giordano no cifra grandes expectativas.
“Va a continuar con el legado de este Gobierno, un gobierno que ya fracasó, con cero capacidad de diálogo y de consensuar con los actores sociales. El ministro de Hacienda, en lo que queda de este gobierno, solo seguirá la senda del fracaso y de la desaprobación total de la población y, por supuesto, de las y los trabajadores organizados”, concluyó el presidente del Sindicato de Starbucks Chile.