La decisión del Gobierno de expulsar del territorio nacional a 138 migrantes a través de un vuelo de las Fuerzas Armadas y también de buses provocó múltiples críticas a nivel interno, pero también a nivel internacional.
Desde Venezuela, Julio Borges, el “comisionado de asuntos exteriores” del líder opositor venezolano Juan Guaidó expresó su rechazo a la medida implementada en la frontera de Chile con Bolivia y recordó el rol que cumplió Venezuela con los exiliados durante la dictadura de Augusto Pinochet.
“La decisión del gobierno chileno de deportar a un grupo de venezolanos no está en consonancia con la conducta asumida por los gobiernos democráticos venezolanos que recibieron a cientos de chilenos que huían de las dictaduras más brutales y que hicieron de nuestro país su segunda patria” manifestó a través de una publicación en su cuenta de Twitter.
En ese mismo sentido se expresó el representante de la oposición ante la OEA, David Smolansky, quien en la misma red social declaró que las expulsiones de venezolanos no detendrán la salida de éstos de su país.
Las deportaciones no van a frenar el deslave humano de venezolanos. No se emigra voluntariamente, se huye forzosamente de la dictadura, son refugiados.
Aquellos con antecedentes penales, que les caiga todo el peso de la ley, pero por unos pocos no pueden pagar muchos inocentes
— David Smolansky (@dsmolansky) February 10, 2021
El llamado Plan Colchane impulsado por el Ejecutivo sumado a la decisión de reforzar el control fronterizo con el despliegue de efectivos militares han llevado a la disminución de los ingresos de extranjeros por el norte de nuestro país.
