El Tribunal Calificador de Elecciones acogió el requerimiento de cesación en el cargo de quien fue la alcaldesa de Viña del Mar desde el 2004, Virginia Reginato, por la causal de “notable abandono de sus deberes”. La deliberación del Tribunal además, la inhabilita para ejercer cualquier cargo público por el término de cinco años. 

La decisión del Tricel imposibilita a Reginato a ejercer como concejala de la Municipalidad de Viña del Mar, cargo para el cual fue electa en las últimas elecciones municipales con la primera mayoría, 5,72% de las preferencias, equivalente a 7 mil votos. 

“Si bien la destitución del cargo de alcaldesa resulta improcedente en estos autos, solo porque en la actualidad la requerida ya no sirve el cargo que ostentaba a la data del requerimiento, no obstante la señora Reginato Bozzo queda inhabilitada para ejercer cualquier cargo público por el término de cinco años a contar de la fecha en que esta sentencia quede ejecutoriada”, añade el fallo.

La acusación fue presentada durante el 2019 por los concejales de Viña del Mar, Mar Laura Giannici, Sandro Puebla, Víctor Andaur y Marcela Vargas, bajo el concepto de graves faltas administrativas y notable abandono de deberes, motivo por le cual, en marzo de este año, Reginato fue suspendida de su cargo como alcaldesa. Asimismo, los y las concejales añadieron que la ex edil mantenía al edificio municipal en permanente estado de déficit.

En ese sentido, el Tricel determinó la ausencia de fiscalización del desempeño de la distintas unidades del municipio y “la supervigilancia del acatamiento a las disposiciones en materia financiera y contable, frente a las omisiones e inobservancias contables, financieras y administrativas que en esos ámbitos advirtió la Contraloría Regional y que han sido debidamente comprobadas (…) obedece a la falta de rigurosidad en el manejo de las cuentas municipales”.

“No es suficiente”

Tras el fallo del Tricel, la alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, a través de sus cuentas de Instagram y Twitter, acusó a Reginato por ocultamiento de información financiera, en perjuicio del gobierno local.

“Su actitud fue manifiesta, reiterada e inexcusable. Eso no es todo. Es decidor. El gran sustento de esto es un informe de la Contraloría por un déficit de 17 mil 500 millones de pesos. Pero además se empieza a ver que aquí había un ocultamiento de información”, escribió.

Asimismo, señaló que como ciudadanía, no se podía tolerar que el aparato público sea instrumentalizado para efectos de satisfacer intereses personales, por sobre los intereses generales. “Tenemos que cuidar las instituciones, y el daño que aquí se hizo, fue dramático”, lamentó.

En esa línea, Ripamonti aseguró que persistirá en la persecución de responsabilidades, en la medida que la magnitud de lo realizado por Reginato, no puede corresponder a una ejecución individual.

“Investigaremos a cada persona que haya participado en defraudar y mal utilizar el aparato municipal para satisfacer intereses personales”, declaró.