Este jueves, los alcaldes de las comunas de Puchuncaví, Quintero, Til-Til, Coronel, Huasco y Mejillones, sostuvieron una reunión con el equipo político de Gabriel Boric en la cual se abordó el daño ambiental y posibles soluciones para los territorios que ellos dirigen.
El encuentro, desarrollado en la llamada “Moneda chica”, buscó comprometer al venidero Gobierno para que asuma compromisos con el fin de descontaminar las llamadas zonas de sacrificio.
“Buscamos tender puentes y relaciones de confianza con el nuevo gobierno, para que nuestras comunas y vecinos tengan un trato justo por parte del Estado”, dijo a la salida del encuentro Luis Valenzuela, alcalde de Til-Til.
“Tienen que existir conversaciones cercanas de nuevas políticas públicas, y concordamos con el Presidente electo, con Jackson y su equipo; que estas zonas no pueden seguir creciendo en el país, y que debe haber un trato preferente para poder restaurarla y recuperarla”, agregó Valenzuela.
Por su parte, el alcalde de Puchuncaví, Marcos Morales, indicó que, además de resolver el urgente problema medioambiental, se debe pensar en el desarrollo turístico de las comunas en cuestión.
“Lo que hacemos hoy es generar un cambio, de pasar de zona de sacrifico a una zona de recuperación. Hay que pensar no solo en el daño ambiental, también hay que pensar en el futuro y en el desarrollo turístico”.
El encuentro entre los alcaldes de las zonas de sacrificio y el equipo de Gabriel Boric se desarrolló tan solo un par de horas después que las autoridades comunales presentaran una norma constitucional ante la Convención.
Dicha normativa sostiene que “el Estado debe garantizar la gestión ambiental descentralizada, regional y comunal, mediante mecanismos y la destinación de recursos atingentes a la realidad territorial, incluyendo los gravámenes asociados a las actividades”.
“El Estado es garante activo de la preservación de la naturaleza como soporte vital, incluyendo la protección del medioambiente y asegurando el desarrollo sustentable en la actividad económica, debiendo trabajar mancomunadamente para el logro de estos fines”, continúa el texto de la propuesta de norma.
Además la iniciativa sugiere que las llamadas zonas de sacrificio pasen a denominarse “zonas de restauración ambiental”.