Fue durante esta semana que la comisión de Normas Transitorias tuvo su primera definición con la votación de las indicaciones a las propuestas emanadas por las comisiones temáticas para avanzar de la actual a la nueva Constitución, en caso de ser aprobada.

Por lo que ahora dichas normas deberán reunir los 103 respaldos requeridos en el pleno para pasar a ser parte del texto constitucional definitivo.

Así, el pasado jueves una de las primeras resoluciones de la comisión tuvo que ver con materias referentes al sistema político, en las que se aprobó, por ejemplo, el término del mandato de los senadores en 2026 y el quorum de 2/3 para reformar la nueva Carta Fundamental.

Mientras en la segunda jornada de votación llevó a cabo hasta total despacho la revisión del resto de las enmiendas, partiendo por aquellas relacionadas a derechos fundamentales.

En entrevista con Radio Universidad de Chile, el convencional del Frente Amplio y miembro de la comisión, Jaime Bassa, destacó la evolución del proceso, “señalando que hemos podido desatar algunos nudos importantes relacionados con la implementación de la nueva Constitución, principalmente en lo que dice relación con la progresividad en la implementación del sistema político, la planificación de las próximas elecciones que vienen en el país a nivel regional y municipal, como de carácter nacional”.

En ese sentido, destacó que “la comisión de Normas Transitorias ha llevado adelante un trabajo muy concienzudo y muy profundo sobre la fórmula en que tiene que implementarse la nueva Constitución y específicamente respecto del sistema político se han evaluado y valorado todas las alternativas posibles que permitan no solamente respetar los mandatos de las autoridades actualmente en ejercicio, sino que generar condiciones que permitan garantizar la adecuada implementación de la nueva Constitución”.

“Hay que recordar que la Constitución vigente cuando establece las reglas del proceso constituyente señala expresamente que la nueva Constitución podrá suspender o dar por terminado ciertas funciones, cargos cuando las instituciones en cuestión experimenten modificaciones sustanciales. Eso es lo que va a ocurrir con el Senado una vez que termine el actual período legislativo en 2026 porque va a ser reemplazado por una institucionalidad nueva”, apuntó.

Por lo que defendió que se trata de una determinación “no solamente coherente con el marco normativo dentro del cual se desarrolla el trabajo de la Convención Constitucional, sino que además es coherente con el contenido de las decisiones políticas que se han tomado en el resto de las comisiones”.

En cuanto a los reparos que ha suscitado entre los distintos sectores el establecimiento de un quorum de 2/3 en el actual Parlamento para reformar la nueva Constitución, el ex vicepresidente de la Convención comentó que “esta es una discusión que está en desarrollo, si bien esto fue aprobado por la comisión de Normas Transitorias, tiene que pasar todavía por el pleno y ya sabemos que este ha cumplido funciones de moderación de las propuestas que se han formulado inicialmente. Por lo tanto, creo que todavía es prematuro para tener una opinión definitiva”.

Sin perjuicio de lo anterior, consideró que en cuanto a las responsabilidades de la entidad “me parece mucho más importante que el Congreso apure la tramitación de los proyectos de ley que van a ser necesarios para la implementación de la nueva Constitución antes que empezar a reformar un texto que ni siquiera ha terminado de ser redactado. Igual es curioso que haya sectores que ya empiezan a hablar de reformas sin tener claridad de la implementación de ese nuevo texto”.

“Uno esperaría que aquello que deba ser reformado y, que seguramente van a haber cuestiones que van a necesitar reforma y adecuaciones, sea como consecuencia de la observación de esa implementación en primer lugar, para que podamos determinar qué parte del diseño de la nueva Constitución podría mejorarse en su funcionamiento”, expresó.

En cuanto a la solicitud de convencionales de Vamos por Chile de retirar 145 de las 302 normas transitorias propuestas por las comisiones temáticas– ya sea por “revivir” materias de artículos permanentes o por tratarse de disposiciones que no cuentan con una norma base- el convencional Jaime Bassa manifestó que “en un régimen democrático y especialmente cuando se trata de una asamblea colegiada que tiene que tomar decisiones democráticamente es muy importante aprender a respetar las decisiones que toma el órgano que está encargado de dirigir el trabajo del colectivo”.

En ese sentido, planteó que “tanto la mesa de la Convención Constitucional como la coordinación de la comisión de Normas Transitorias han sopesado los distintos antecedentes y han tomado una decisión, respetando no solamente la normativa reglamentaria vigente, sino que sobre todo respetando las decisiones y propuestas que vienen desde las comisiones temáticas hacia la comisión de Normas Transitorias”.

Por los mismo, puntualizó que la instancia “no tiene la capacidad de hacer un control de admisibilidad de aquellas propuestas de normas que han sido aprobadas en general por las comisiones temáticas. Por lo tanto, no hay ningún sustento normativo que permita afirmar que aquí hay una irregularidad, precisamente porque la coordinación de la comisión ha tomado una decisión que se apega al reglamento”.

Por otra parte, se refirió al trabajo territorial que se desarrollará este fin de semana, a través de las jornadas “Hablemos de un Chile Justo” y adelantó que estará participando en algunos encuentros en Valparaíso. “Creo que esto es parte del mandato que la Convención Constitucional ha recibido, que es informar permanentemente, generar espacios de participación y diálogo y de alguna manera contribuir a recuperar la confianza de la ciudadanía en las instituciones”, afirmó.