En una actividad en la Casa de Acogida de la Fundación Scalabrini, en la comuna de Providencia, la subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Perales, profundizó sobre el Plan de Invierno que ya comenzó a regir en el país, el cual contempla un nuevo modelo de dispositivos pensados para familias, con niños, niñas y adolescentes.
En la instancia, la autoridad relevó que “los albergues deben generar condiciones de vida digna para las personas, para las familias, y también ir haciendo un acompañamiento para poder salir de la situación de calle. La situación de calle se puede superar y, por tanto, la idea de estos centros de acogida, además de entregar abrigo, es entregar acompañamiento laboral, jurídico, psicosocial, de salud mental. Eso es lo que vamos a estar fortaleciendo”.
En ese sentido, comentó que “la composición de las personas en situación de calle ha ido variando durante el último tiempo a propósito de dos factores, la pandemia, donde familias perdieron sus hogares, y también producto de la crisis migratoria que vive nuestro continente. Por tanto, la composición pasa de ser personas adultas, por lo general solas, principalmente hombres, a familias. Eso también requiere de un rediseño y remirar cuál es el modelo de intervención que tiene el Estado en materia de personas en situación de calle”.
“Eso nos pone también desde la perspectiva de poder abrir espacios de acogida para familias, considerando además que los modelos previos lo que hacían eran segmentar a los grupos familiares cuando estaban en situación de calle y generar condiciones de vida digna de las personas, porque también lo que se hacía anteriormente era tener grandes espacios de albergues durante el invierno, donde básicamente no había ninguna privacidad, donde solamente se paleaban las crisis de bajas temperaturas o alguna emergencia climática específica”, detalló.
En cuanto a las medidas para enfrentar el invierno, la Subsecretaría informó sobre 378 dispositivos funcionando a lo largo el país, con presencia en todas las regiones a través de los planes Protege, Noche Digna, Vivienda Primero y Código Azul. A esos se le suman 254 nuevos dispositivos, que están en proceso de habilitación, con los que se podrá alcanzar 7.667 cupos diarios en albergues en todo el país, y cerca de 10 mil cupos si se consideran todas las atenciones, como rutas sociales, centros diurnos, entre otros.
Adicionalmente, se han inyectado más recursos para los diferentes programas destinados a personas en situación de calle, llegando a un total de 31 mil millones de pesos; se realizará un nuevo catastro de esta población, y ya se encuentra sesionando la Mesa Nacional de Calle, liderada por el Ministerio de Desarrollo Social, en la que se busca dar una respuesta intersectorial, trabajando de manera conjunta con los ministerios de Salud, Vivienda, Educación e Interior, así como asociaciones de municipalidades, de gobernadores regionales, delegaturas presidenciales y organismos de la sociedad civil.
“Nos interesa es establecer un estándar a través del trabajo conjunto, pero no solamente para la emergencia y el invierno, también en la proyección de como tienen que colaborar los organismos del Estado y de la sociedad civil para poder trabajar en esta materia. Queremos avanzar hacia el fortalecimiento de la agenda de vivienda para personas en situación de calle. Es por ello que vamos a realizar un nuevo catastro de personas en situación de calle, porque los datos que tenemos desde el Estado están muy desactualizados, y en los últimos años las condiciones de las personas en situación de calle han cambiado”, agregó la Subsecretaria Perales.
En una actividad en la Casa de Acogida de la Fundación Scalabrini, en la comuna de Providencia, la subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Perales, profundizó sobre el Plan de Invierno que ya comenzó a regir en el país, el cual contempla un nuevo modelo de dispositivos pensados para familias, con niños, niñas y adolescentes.
En la instancia, la autoridad relevó que “los albergues deben generar condiciones de vida digna para las personas, para las familias, y también ir haciendo un acompañamiento para poder salir de la situación de calle. La situación de calle se puede superar y, por tanto, la idea de estos centros de acogida, además de entregar abrigo, es entregar acompañamiento laboral, jurídico, psicosocial, de salud mental. Eso es lo que vamos a estar fortaleciendo”.
En ese sentido, comentó que “la composición de las personas en situación de calle ha ido variando durante el último tiempo a propósito de dos factores, la pandemia, donde familias perdieron sus hogares, y también producto de la crisis migratoria que vive nuestro continente. Por tanto, la composición pasa de ser personas adultas, por lo general solas, principalmente hombres, a familias. Eso también requiere de un rediseño y remirar cuál es el modelo de intervención que tiene el Estado en materia de personas en situación de calle”.
“Eso nos pone también desde la perspectiva de poder abrir espacios de acogida para familias, considerando además que los modelos previos lo que hacían eran segmentar a los grupos familiares cuando estaban en situación de calle y generar condiciones de vida digna de las personas, porque también lo que se hacía anteriormente era tener grandes espacios de albergues durante el invierno, donde básicamente no había ninguna privacidad, donde solamente se paleaban las crisis de bajas temperaturas o alguna emergencia climática específica”, detalló.
En cuanto a las medidas para enfrentar el invierno, la Subsecretaría informó sobre 378 dispositivos funcionando a lo largo el país, con presencia en todas las regiones a través de los planes Protege, Noche Digna, Vivienda Primero y Código Azul. A esos se le suman 254 nuevos dispositivos, que están en proceso de habilitación, con los que se podrá alcanzar 7.667 cupos diarios en albergues en todo el país, y cerca de 10 mil cupos si se consideran todas las atenciones, como rutas sociales, centros diurnos, entre otros.
Adicionalmente, se han inyectado más recursos para los diferentes programas destinados a personas en situación de calle, llegando a un total de 31 mil millones de pesos; se realizará un nuevo catastro de esta población, y ya se encuentra sesionando la Mesa Nacional de Calle, liderada por el Ministerio de Desarrollo Social, en la que se busca dar una respuesta intersectorial, trabajando de manera conjunta con los ministerios de Salud, Vivienda, Educación e Interior, así como asociaciones de municipalidades, de gobernadores regionales, delegaturas presidenciales y organismos de la sociedad civil.
“Nos interesa es establecer un estándar a través del trabajo conjunto, pero no solamente para la emergencia y el invierno, también en la proyección de como tienen que colaborar los organismos del Estado y de la sociedad civil para poder trabajar en esta materia. Queremos avanzar hacia el fortalecimiento de la agenda de vivienda para personas en situación de calle. Es por ello que vamos a realizar un nuevo catastro de personas en situación de calle, porque los datos que tenemos desde el Estado están muy desactualizados, y en los últimos años las condiciones de las personas en situación de calle han cambiado”, agregó la Subsecretaria Perales.
En una actividad en la Casa de Acogida de la Fundación Scalabrini, en la comuna de Providencia, la subsecretaria de Servicios Sociales, Francisca Perales, profundizó sobre el Plan de Invierno que ya comenzó a regir en el país, el cual contempla un nuevo modelo de dispositivos pensados para familias, con niños, niñas y adolescentes.
En la instancia, la autoridad relevó que “los albergues deben generar condiciones de vida digna para las personas, para las familias, y también ir haciendo un acompañamiento para poder salir de la situación de calle. La situación de calle se puede superar y, por tanto, la idea de estos centros de acogida, además de entregar abrigo, es entregar acompañamiento laboral, jurídico, psicosocial, de salud mental. Eso es lo que vamos a estar fortaleciendo”.
En ese sentido, comentó que “la composición de las personas en situación de calle ha ido variando durante el último tiempo a propósito de dos factores, la pandemia, donde familias perdieron sus hogares, y también producto de la crisis migratoria que vive nuestro continente. Por tanto, la composición pasa de ser personas adultas, por lo general solas, principalmente hombres, a familias. Eso también requiere de un rediseño y remirar cuál es el modelo de intervención que tiene el Estado en materia de personas en situación de calle”.
“Eso nos pone también desde la perspectiva de poder abrir espacios de acogida para familias, considerando además que los modelos previos lo que hacían eran segmentar a los grupos familiares cuando estaban en situación de calle y generar condiciones de vida digna de las personas, porque también lo que se hacía anteriormente era tener grandes espacios de albergues durante el invierno, donde básicamente no había ninguna privacidad, donde solamente se paleaban las crisis de bajas temperaturas o alguna emergencia climática específica”, detalló.
En cuanto a las medidas para enfrentar el invierno, la Subsecretaría informó sobre 378 dispositivos funcionando a lo largo el país, con presencia en todas las regiones a través de los planes Protege, Noche Digna, Vivienda Primero y Código Azul. A esos se le suman 254 nuevos dispositivos, que están en proceso de habilitación, con los que se podrá alcanzar 7.667 cupos diarios en albergues en todo el país, y cerca de 10 mil cupos si se consideran todas las atenciones, como rutas sociales, centros diurnos, entre otros.
Adicionalmente, se han inyectado más recursos para los diferentes programas destinados a personas en situación de calle, llegando a un total de 31 mil millones de pesos; se realizará un nuevo catastro de esta población, y ya se encuentra sesionando la Mesa Nacional de Calle, liderada por el Ministerio de Desarrollo Social, en la que se busca dar una respuesta intersectorial, trabajando de manera conjunta con los ministerios de Salud, Vivienda, Educación e Interior, así como asociaciones de municipalidades, de gobernadores regionales, delegaturas presidenciales y organismos de la sociedad civil.
“Nos interesa es establecer un estándar a través del trabajo conjunto, pero no solamente para la emergencia y el invierno, también en la proyección de como tienen que colaborar los organismos del Estado y de la sociedad civil para poder trabajar en esta materia. Queremos avanzar hacia el fortalecimiento de la agenda de vivienda para personas en situación de calle. Es por ello que vamos a realizar un nuevo catastro de personas en situación de calle, porque los datos que tenemos desde el Estado están muy desactualizados, y en los últimos años las condiciones de las personas en situación de calle han cambiado”, agregó la Subsecretaria Perales.
