Como una reforma necesaria calificaron desde el oficialismo la propuesta de modificación al sistema tributario del país que presentó el gobierno durante esta jornada con una larga exposición del ministro de Hacienda Mario Marcel. Pero el entusiasmo de los parlamentarios allegados al Ejecutivo fue contrastado por la visión de los legisladores de derecha y del presidente de la Confederación de la Producción y Comercio, Juan Sutil, quien lamentó el diálogo “parcial” que hubo en esta materia con La Moneda.

El líder empresarial se refirió al impuesto al capital, afirmando que “dice relación con que se produce una desintegración del sistema, y por lo tanto, las empresas tributan por sus ingresos, que es lo que ellos llaman el ingreso al trabajo, y las personas o los accionistas, van a tributar a través de rentas generales”.
Por otro lado, el timonel de la CPC fue consultado por el reclamo de la Cámara Nacional del Comercio (CNC) de no haber sido incluida en el diálogo prelegislativo.

“Yo soy presidente de la Confederación de la Producción del Comercio, y ahí están los presidentes de rama. Yo debo reconocer que he conversado con el ministro Marcel en varias oportunidades respecto a la reforma tributaria, donde le he manifestado mis planteamientos en representación del sector empresarial, donde hay algunos que -siento- se recogieron en parte, otros que no”, explicó Sutil.

“Para mí, el diálogo significa en el caso de este proceso público, es que más que escuchar a la ciudadanía como dijo el ministro, para mí es cuando escuchas, rebates, discutes y acuerdas. Y ese proceso fue parcial, y a eso se refieren claramente los dirigentes de los gremios”, sentenció.

Mientras, el diputado Frank Sauerbaum (RN), integrante de Comisión de Hacienda, sostuvo que “el Gobierno con esta reforma no se hace cargo de la situación económica en la que nos encontramos. Pareciera que no pasa nada, pero tenemos una recesión ad portas, un alto nivel de inflación, una devaluación de la moneda nacional muy importante y por lo tanto hay que agregarle elementos que tengan que ver con la reactivación económica, con la generación de nuevas inversiones y con la generación de nuevos puntos de trabajo”.

A las críticas se sumó la diputada por Atacama Sofía Cid (RN), integrante de la Comisión de Economía, quien indicó que “el gobierno con este proyecto no se hace cargo del complejo escenario nacional -con alta inflación-, y una recesión a la vuelta de la esquina. Me preocupa el efecto de la propuesta en materia de arriendos de propiedades y la restricción de deducción de gasto de créditos hipotecarios”.

Del otro lado, el senador socialista Gastón Saavedra valoró la propuesta que es “una reforma de carácter estructural, una reforma tributaria que permite captar 12 mil millones de dólares. Esto va direccionado primero a que haya más inversión por parte de las empresas para generar trabajo, para aumentar la productividad, pero al mismo tiempo para generar un modelo de desarrollo sustentable para el país”.

Saavedra agregó que “se permite con este mayor ingreso por parte del Estado cubrir todos los desafíos en educación, trabajo, vivienda, en suma, en todos los derechos sociales que aún no hemos resuelto”.

El legislador del PS subrayó que “esta es una reforma que sólo ‘afectaría’ al 3 por ciento que le va bien en el país y por tanto el 97 por ciento de los chilenos están exentos de esta reforma. Y junto con ello además, se privilegia la pequeña y mediana empresa que es la que genera empleo, la que genera riqueza, porque ella no está afecta a esta reforma tributaria”.

Mientras, el senador Iván Flores (DC), comentó que “no cabe duda de que esta es, sin duda, la reforma más importante, el pilar esencial para avanzar en las demandas sociales pendientes y el financiamiento progresivo y permanente de políticas públicas que mejoren la calidad de vida de los chilenos y chilenas”.

Flores descartó algunas críticas referidas a la oportunidad de este debate, señalando que “llevamos años insistiendo en esta demanda por justicia tributaria, años. Es la única forma de financiar aspectos tan claves como mejores pensiones; el déficit habitacional y más recursos para regiones entre otros temas. Espero que exista generosidad para poder avanzar, con todas las perfecciones y conversaciones que debamos tener “.

El parlamentario también señaló que “se han recogido varios de los asuntos que hemos venido planteando insistentemente, como el impuesto progresivo a las grandes fortunas de Chile, superiores a los cinco millones de dólares; impuesto al patrimonio, impuesto a la renta; y no debe escandalizarse nadie porque esto se hace en otros países que forman la OCDE. Debemos también terminar con las triquiñuelas para evadir o eludir, como ejemplo, las donaciones de grandes empresarios que hacen a sus parientes”.

“Justicia tributaria con responsabilidad social son, sin duda, la mezcla necesaria para transitar a más y mejores servicios y bienes sociales; sin justicia tributaria no habrá ni equidad ni desarrollo integral. Estoy optimista, pero no entregando un cheque en blanco, porque tenemos que asegurar que ni la clase media ni las pymes se puedan ver afectados. Que sean los que tienen más, los que paguen más”, puntualizó.

En tanto, la senadora de la Federación Regionalista Verde y Social, Alejandra Sepúlveda, dijo que “nos parece muy importante el ingreso que ha realizado el gobierno en relación a la reforma tributaria. Es muy importante para tener recursos para hacer todas las acciones que se necesitan en vivienda, en educación, en salud, en pensiones. Y al mismo tiempo que esta reforma no sea regresiva, que la paguen aquellas empresas que tienen más recursos, aquellas empresas que hoy día están ganando más y los súper ricos que hoy día se integren, así como el royalty minero”.

La legisladora agregó que “nos parece importante además que no se afecte a las pymes, algo que le habíamos solicitado al gobierno y que podamos tramitarla lo antes posible y de esa forma tener los recursos necesarios para hacer las reformas que nos hemos comprometido en el programa de gobierno”.

La reforma tributaria del gobierno será ingresada en cuatro proyectos separados la próxima semana y busca recaudar de manera gradual al 2025 4,2 puntos del PIB en pleno régimen.