En conversación con Radioanálisis, el exministro de Salud durante el segundo Gobierno de Sebastián Piñera, Emilio Santelices, abordó la crisis económica por la que cruzan las Isapres. Pérdidas según los últimos resultados financieros en la administradoras privadas que el médico atribuyó a las esquirlas de la pandemia, a raíz de la cual se congelaron los precios de las primas y se comenzó a destinar la mitad de la cotización -7 por ciento- a licencias médicas, lo que deja “menores recursos para poder dar cuenta de las coberturas de atención propiamente tal”, señaló.
Abundando en el primer factor, Santelices hizo hincapié en que el estancamiento de las primas se ha acompañado con el aumento acelerado del costo de la vida. “Sabemos que estamos en el 13 por ciento de inflación y también eso influye en que los medicamentos y todo lo que se consume en salud aumenta su precio, por lo tanto si tenemos un aumento en el gasto, solo por el aumento del precio, pero lo que aporta cada persona se mantiene fijo, ahí se ve un diferencial en que ambas situaciones permiten explicar que las pérdidas que hayan declarado en el primer semestre de este año alcance los 70 mil millones de pesos”.
La magnitud de las pérdidas de las Isapres en estos últimos dos años “vienen a equilibrar las ganancias de los últimos nueve”, destacó. En cuanto a la vulnerabilidad de las aseguradoras, Santelices señaló que ello puede depender “de las carteras y de lo que ellos capturen, como de la siniestralidad que es un tema más técnico, es decir de cuánto gasta su población. O bien uno podría asignarle que tienen más gastos de administración”.
“Sin duda que las carteras de las Isapres en cuanto al perfil y la capacidad de pago de cada uno de sus grupos son distintas. Hay Isapres que apuntan a sectores de menores ingresos y otras a sectores de mayores ingresos, en consecuencia, seguramente las de mayores ingresos también tienen asociado planes de mayor costo y las personas asociados a su 7 por ciento pueden estar pagando una mayor cantidad de primas y eso podría sustentar mejor a esas Isapres. Esas son las explicaciones que permiten identificar que las pérdidas que hoy día se declararon sean diferentes entre una u otra institución”, añadió.
En cuanto a la judicialización por el alza de los planes, Santelices trajo a colación el debate sobre la reforma al sistema de salud privado. “Recuerdo cuando yo fui ministro impulsé un proyecto de Ley y hablé de la seguridad social en salud en ese tiempo para terminar con la discriminación por sexo, por edad, y avanzar en un pool de riesgo único, es decir que las cotizaciones todas se socializaran en un solo fondo, para que posteriormente, a partir de esa solidaridad al interior del fondo, el 7 por ciento de todos los chilenos, se pudiera generar una cobertura en función de las necesidades de las personas”.
Pero en ello relevó el rechazo de la oposición de ese entonces, con lo que “llegamos a un punto de intolerancia de parte de las personas de ver que sus planes siguen subiendo, de que se producen estas discriminaciones que se han ido corrigiendo mediante normativas de la Superintendencia, pero que para la gente no es suficiente, entonces finalmente la política pública en salud se termina sancionando en los tribunales”, señaló.
Es así que el otrora ministro de Salud señaló que la coyuntura “es consecuencia de este proceso que la clase política no fue capaz de resolver en los últimos diez años, toda vez que existieron instancias (…) que tuviéramos un sistema que fuera solidario, equitativo, eficiente y que diera esa cobertura en el alero de la seguridad social. Eso no ocurrió”.
La gravedad de ello no radica en el perjuicio que recae en las Isapres, acotó el médico sino “el drama de los 3 millones y medio de chilenos, o poco menos, que hoy día pueden verse en riesgo de no tener cobertura en salud”.
“Ellos no pueden hacerse responsables o ser los culpables de que hayamos tenido un sistema que dejó de funcionar y que los legisladores por dos años miraron para el lado o dificultaron las soluciones que algunos planteamos”, aseveró.
De no intervenir en la situación, Santelices proyectó una crisis sanitaria de magnitudes insospechadas. “Es extraordinariamente alarmante que pudiéramos tener sobre 3 millones de personas que no tengan cobertura para antenderse. Uno podría decir, ‘bueno se van a Fonasa’, está bien pero el Estado tendrá que recurrir con fondos, pero a su vez hay una carga sobre los prestadores que no van a financiar, y muchos de ellos podrían quebrar”.
En esa línea, sostuvo que “más allá que esté claro que el modelo de financiamiento va a cambiar, porque ya existe consenso en muchos temas centrales a nivel país, en el intermedio, como país y las instituciones tenemos que ser serios en generar una transición que dé estabilidad al sistema, hacia al cambio, como así mismo a las personas para que estén resguardados en su seguridad social en el ámbito de la salud”, sostuvo.