En la nueva sección ¿Que dice el texto? del programa Política en Vivo, el periodista Felipe Pozo conversó con la ex ministra de Salud, académica de la Universidad de Chile y doctora, María Soledad Barría, acerca de lo que propone la nueva Constitución respecto a salud.
La exautoridad de Gobierno señaló que la propuesta constitucional trae cambios en esta materia que son absolutamente fundamentales. “Hoy la Constitución de 1980 sólo garantiza el derecho a elegir entre un sistema público y un sistema privado, no garantiza la salud”, destacó y agregó que quienes pueden elegir en qué sistema de salud atenderse, es tan solo un 18 o 20% de la población que tiene los recurso y que tiene una situación de salud que le permite mantenerse en el sistema privado.
La académica afirmó que lo que propone la nueva Constitución es garantizar el derecho a la salud física, así como el derecho a la salud mental. Así, comentó que la salud es mucho más que los sistemas de salud como tales.
En ese sentido, señaló que desde los años 40 en Chile se sabía que la cuestión social era un factor muy importante para el estado de bienestar de la población. Barría expuso que hoy la Organización Mundial de la Salud reconoce que la mitad del impacto en la salud de las personas que viven en poblaciones tiene que ver con las condiciones sociales, económicas y ambientales, mientras que solo el 25% tiene relación con el sistema de atención. “Eso es lo que se llama los determinantes sociales de la salud”, manifestó.
El nuevo texto constitucional en el Artículo 44, inciso tercero establece: El Estado debe proveer las condiciones necesarias para alcanzar el más alto nivel posible de la salud, considerando en todas sus decisiones el impacto de las determinantes sociales y ambientales sobre la salud de la población. “Eso no había sido reconocido jamás en una Constitución, es decir, aquí se obliga al Estado a no tener más Zonas de Sacrificio por ejemplo”, opinó la especialista.
La exministra declaró que con la propuesta de texto existe la posibilidad de un nuevo sistema de salud, el cual sería universal y solidario, pero no único, lo cual consideró importante recalcar. Asimismo, explicó que el nuevo sistema estaría basado en la atención primaria, lo que significa que la atención estaría enfocada en promover la salud, mantener las mejores condiciones sanitarias posibles, trabajando con la comunidad y otros sectores.
“La vida sucede en los territorios, allí es donde uno vive, trabaja, donde se juega, se distrae y tienen que ver equipos sanitarios en los distintos territorios preocupados no solamente de dar atención cuando se solicita por una enfermedad”, detalló la académica.
¿Qué va a pasar con los planes de salud?
La académica de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, comentó que lo señalado en la propuesta de nueva Constitución es que todas las prestaciones sociales tienen que ir a un fondo de financiamiento único.
“Lo que está planteado es que en principio este sistema nacional de salud debiera ser financiado por impuestos generales y que se pondrán solicitar cotizaciones, además de los impuestos, que en ese caso tendrán que ir al fondo”, explicó.
Barría indicó que hoy las isapres reciben las cotizaciones de sus afiliados más lo que esté estipulado en la contratación del servicio privado, a modo de seguro financiero. “Ellos compran prestaciones a prestadores privados y a veces públicos, por eso es que muchas veces en regiones cuando no hay prestadores privados la isapre tiene que cancelar una intervención en un hospital público”, manifestó.
Por lo que, la médica aclaró que el texto constitucional propone que el seguro sea el mismo para todos y todas y pueda haber otros complementarios. Es decir, que las y los usuarios pueden agregar al seguro común, que se va a financiar con impuestos generales y cotizaciones (que pueden ser el 7%, más o menos), un seguro complementario de manera que se eleve la calidad y la cobertura del mismo.
La experta mencionó que las isapres deberían entonces transformarse en seguros. Asimismo, sostuvo que los prestadores privados seguirán funcionando, pero lo que ocurrirá con certeza con las instituciones de salud previsional en caso de que se apruebe el nuevo texto dependerá del debate posterior al 4 de septiembre, porque lo que estipula la propuesta es que en el sistema nacional de salud habrá prestadores públicos y privados y la ley determinará las condiciones para su funcionamiento.