Ya cerrándose la opción de materializar un acuerdo en noviembre para habilitar un nuevo proceso constituyente, la idea de modificar el itinerario constitucional ha ido tomando fuerza en algunos actores de la mesa negociadora de partidos políticos.
Si bien la semana pasada el senador de Demócratas, Matías Walker, planteó replicar el cónclave sostenido entre las distintas fuerzas en 2019 para definir un consenso, este finalmente fue descartado, toda vez que sigue siendo una piedra de tope la discusión sobre el mecanismo con que se redactará la nueva Carta Fundamental, para el que existen varias propuestas: un órgano de 99 integrantes electos (oficialismo), uno de 50 miembros electos (Chile Vamos), uno de 60 convencionales elegidos (Demócratas), uno de 78 integrantes electos (DC) y una entidad con expertos designados por el Congreso (Amarillos).
En conversación con Radio Universidad de Chile, el presidente de Comunes, Marco Velarde, manifestó su apertura de aplazar las elecciones de los futuros integrantes del órgano redactor para septiembre u octubre de 2023, pese a defender la postura inicial del oficialismo que apunta a que el evento electoral se concrete en abril.
Velarde dijo que “es evidente que con el alargue de las negociaciones uno tiene que evaluar si es que vamos a llegar a la fecha en abril. Por eso hemos insistido desde el principio que el acuerdo no se tiene que haber extendido tanto y tiene que haber sido de manera rápida”.
Sobre esto último aclaró que “de manera rápida no significa quitarle peso a la discusión política, pero ya ha sido lo suficientemente claro que el tiempo que ha durado esta negociación está afectando al calendario electoral”.
En esa línea, cuestionó la postura que ha tomado la oposición en las conversaciones, señalando que “nosotros hace ya casi un mes que presentamos una propuesta donde indicábamos la fecha de elecciones y por parte de la derecha no hemos tenido ninguna respuesta para hablar de esto, recién ahora, que estamos abriendo el tema para que pueda ser discutido por la opinión pública, se preocupan por la fecha. Entonces, me parece que llegan bastante tarde a la discusión de la que se debieron hacer cargo hace mucho rato”.
Esto, considerando que en Chile Vamos han cuestionado un eventual aplazamiento de las elecciones. De hecho, el presidente de la UDI, el senador Javier Macaya, expresó que “desde el oficialismo solamente se ha mostrado una fórmula que es muy parecida a la que fracasó y si esto se posterga, si esto fracasa va a ser por responsabilidad del maximalismo, la intransigencia y la voluntad de que se repita exactamente un ejercicio muy similar al que fracasó el 4 de septiembre”.
Con todo, el timonel de Comunes recalcó que “las negociaciones no son estáticas, tenemos una propuesta, que más allá de la fecha, se preocupa de tener un órgano constituyente 100% electo, legítimo, representativo y con participación ciudadana. Entonces, en la fecha que sea tenemos que tener un proceso constitucional que decante en una propuesta legítima, válida y sostenible en el tiempo para poder determinar el futuro del país en las próximas décadas”.
Por lo mismo, evitó profundizar sobre el plazo con que podría finalmente cerrarse el acuerdo. “Ya parecemos como ‘Pedro y el lobo’ diciendo cuándo va a venir la fecha o cuál es el mes de término de las negociaciones. Ya a estas alturas prefiero que se vean en el curso que se tengan que dar, pero esto no obsta de llamar a la oposición y al resto de los actores políticos a que cumplamos el deber que tenemos como partidos ante la sociedad, que es entregar respuestas y certezas claras sobre si vamos a tener una nueva Constitución o no”.
“Ya el país no va a aguantar una nueva Constitución de cinco o diez años, tenemos que tener un texto que perdure en el tiempo y que nos entregue un horizonte de necesidad compartidas”, agregó.
En esa línea, Marco Velarde calificó como “preocupante” el resultado de la última encuesta Cadem que apuntó que el 71% cree que es “poco o nada probable” que el Congreso llegue un acuerdo constitucional antes de fin de año. “Tenemos que llegar a un acuerdo con prontitud, pero que también dé las señales correctas”, manifestó.
Asimismo, dijo esperar que en la próxima reunión de partidos “salgamos con una definición política sobre un órgano 100% electo, no hay piso en la sociedad chilena para tengamos un órgano designado a dedo o mixto, ya hay suficiente masa crítica que nos dice que lo mejor para la estabilidad social y política del país es que tengamos un órgano representativo y totalmente elegido”.
