Hasta el Palacio de La Moneda llegaron esta mañana cerca de 500 personas agrupadas bajo el Movimiento Solidario Vida Digna para entregar una carta al Presidente Gabriel Boric denunciando el fracaso del Plan de Emergencia Habitacional, impulsado por el Gobierno, ante el retraso de proyectos comprometidos a los pobladores.
Según el comunicado de la organización, las familias acusan que la actual administración “no agilizó la compra de suelo, tampoco los procesos de postulación ni las entregas de obras”.
Respecto de las cifras de avance que reporta el ministro de Vivienda, Carlos Montes, dando cuenta de un 30,6 por ciento del programa, la organización señaló que “están infladas con proyectos de gobiernos anteriores, lo que demuestra que el Plan de Emergencia solo es más de lo mismo, una continuidad sin sentido de urgencia”.
El vocero del movimiento, Simón González, dio cuenta que la organización pide solución a tres proyectos habitacionales. El primero, para la Comunidad Organizada La Bandera donde solicitan “que no se siga retrasando la entrega de la obra que ya están terminadas para 80 familias”.
En el caso de la Agrupación de Allegados de Huechuraba que agrupa a 153 familias exigen que “se inicien los trámites de postulación y también la construcción, ya que llevamos desde el año 2019 con un terreno asignado -comprometido- y todavía no se inician obras ni una postulación“.
Por último, para las 600 familias organizadas alrededor del Comité Huechuraba, Conchalí y San Joaquín piden “que se firme la compraventa de un terreno en la comuna de Huechuraba y que ahí también se establezca un plan maestro para la construcción de infraestructura urbana pública como, por ejemplo, una escuela de educación básica y media”.
“En esa zona solamente hay servicios que no son públicos, son la mayoría privados, por ejemplo, hay cinco colegios privados, muchas clínicas y nosotros exigimos que como vamos a llegar ahí 600 familias también se cubra esa necesidad educativa que merecemos”, apuntó.
González además dio cuenta que “en los últimos años, sobre todo desde la pandemia, acá en la comuna de Huechuraba y en todo Chile en realidad, las tomas de terreno por necesidad habitacional han ido en aumento y, si bien ocurre que en algunas zonas hay venta de terreno que son quizá algunas mafias, la mayoría de las familias compran un terreno o se toman un terreno por una necesidad que es real, que no pueden seguir gastando plata en arriendo, no pueden seguir aguantando condiciones de allegamiento“.
“Por ejemplo, en Huechuraba hay familias que viven 20, 30 familias en un terreno de 10 por 20. Entonces, eso es lo que no ha ido afectando día a día”, concluyó.
Tras la manifestación, el equipo técnico del movimiento llegó hasta el edificio del Servicio de Vivienda y Urbanismo (Serviu) en Arturo Prat 80 para sostener una reunión con el director del ente, Roberto Acosta, y negociar el avance y el cierre de los compromisos.
Imagen de Portada: Agencia ATON