Los últimos hechos de crímenes y violencia en la Región Metropolitana llevaron al gobierno del Presidente Gabriel Boric a anunciar nuevas medidas de seguridad. Urgencia en proyectos de inteligencia y una nueva cárcel fueron parte de los anuncios realizados durante la semana pasada.
Respecto a la situación a nivel país, el alcalde de Huechuraba, Carlos Cuadrado Prats, en diálogo con la primera edición de Radioanálisis, afirmó que hay un “problema grave de inteligencia, no solo artificial, sino que humana”. “En Chile se ha perdido la rigurosidad o disciplina laboral, por lo tanto los resultados que se van obteniendo en un ámbito tan urgente y primordial para la gente como la seguridad se retarda, hasta que ya no es posible”, reflexionó en primer lugar.
Tras ello, el jefe comunal se refirió al avance del crimen organizado en el país y cuestionó la división entre las instituciones encargadas de hacerle frente. “Uno no puede limitar su acción por las propias limitaciones que nos hemos autoimpuesto o que hemos construido con el tiempo. El trabajo separado, no coordinado, de las instituciones hace que finalmente el crimen organizado sienta que están enfrentando un adversario, que es el Estado, dividido. Y cuando se combate dividido, lo más probable es la derrota”, expresó Cuadrado.
Junto con lo anterior, el alcalde de Huechuraba criticó duramente la respuesta de senadores y diputados ante el problema. “No puede ser que cuando matan tres personas en el gobierno de la Presidenta Bachelet, cuatro en el de Piñera, cinco en el Boric, la reacción de senadores y diputados sea la misma de hace 12 años: hay que sacar a los militares, hay que imponer el Estado de Sitio. Eso demuestra una limitación en la forma de pensar”, apuntó.
Respecto de las propuestas realizadas por el Ejecutivo en los últimos días, Cuadrado valoró la idea de una nueva cárcel. “Cuando el Presidente hace ver la necesidad de instalar una cárcel, que se demorará tiempo, está apuntando directamente en la prevención de que este tipo de conductas se multipliquen. Ya hay indicios de que las cárceles están siendo manejadas por extranjeros, miembros de mafia internacional o crimen organizado nacional, eso implica necesariamente que el problema se va a agudizar”, mencionó el jefe comunal, quién sí lamentó la demora en una ley de inteligencia en el país.
En la instancia, también lamentó la falta de comunicación entre el Gobierno y los parlamentarios con los municipios para afrontar la crisis de seguridad. “No hay conocimiento de la realidad territorial. Las autoridades no se vinculan mayormente con los municipios y nosotros somos los que sabemos donde están los delincuentes, cuáles son los sectores más conflictivos, cuáles son los nombres, apellidos y alias de quienes están infringiendo la ley, y el Congreso y el Gobierno no se reúne periódicamente con los alcaldes”, señaló el alcalde.