La convocatoria a marchar en Antofagasta en contra de los inmigrantes sigue generando reacciones.

El Comité de Refugiados Peruanos en Chile decidió modificar la fiesta que tenía programada para celebrar el Día del Peruano en el Exterior y convertirla en un acto de desagravio a los colombianos residentes en Chile.

“Queremos demostrar la realidad: Chile es solidario y no es fascista. En Chile prima la integración y la solidaridad del pueblo chileno. Eso es lo fundamental y la fiesta de hoy es una fiesta de hermandad de nuestros pueblos. Eso es lo que vamos a mostrar al público, con nuestras limitaciones y escasos medios, en esta fiesta solidaria y de desagravio”, dijo el presidente del comité, Rodolfo Noriega.

La movilización convocada para el sábado comenzó con la entonación del himno nacional y no congregó a más de 100 personas entre manifestantes y opositores.

La Intendencia no había autorizado la actividad y la alcaldesa de la comuna, Karen Rojo, había rechazado tajantemente el llamado. También lo hizo el ministro del Interior, Andrés Chadwick: “Creo que no corresponden este tipo de marchas y enfrentamientos. Existen los procedimientos para que los extranjeros legalicen su permanencia en Chile y, si no lo han hecho, existen todos los procedimientos administrativos y judiciales para poner término a su permanencia. Por lo tanto, generar conflictos y controversias no corresponde. En nuestro país son bienvenidos los extranjeros, de acuerdo a lo que dice la ley. Y si no están de acuerdo a la ley, las instituciones tienen que funcionar como corresponde”, afirmó.

Pese a estos rechazos, la noticia de la marcha fue titular de medios extranjeros e incluso generó una respuesta del ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia, que expresó su preocupación por los enfrentamientos físicos y virtuales en los últimos días en Chile entre ciudadanos de ambos países.